Suscríbete a
ABC Premium

LA TRIBU

Sin averías

Lo importante es que a ti, niño, y a ti, niña, jamás se os averíe la infancia

Unos niños jugando con sus regalos de Reyes Magos MIKEL PONCE
Antonio García Barbeito

Esta funcionalidad es sólo para registrados

No sé si los Reyes te han dejado un ordenador o un balón, un caballo de madera o un tren eléctrico; no sé si te han dejado una muñeca que anda, llora, canta y ríe; o si te han dejado una casa de muñecas, o ... una cocinita, o una Tablet, o unos vestiditos. No lo sé. Tampoco sé si estarás disfrutando lo que te trajeron o llorando lo que no te trajeron. Es posible que compartas tus juguetes con tus hermanos y amiguitos, o bien prefieras quedarte en soledad con lo que ya has escriturado a nombre de tu infranqueable cuarto. No lo sé. La mañana de ayer fue tan amplia para muchos de vosotros, y —no lo olvides— tan escasa, tan cicatera, para otros niños, que no sé qué pasaría en ese inmenso mundo pequeño de la mañana de Reyes.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia