El PSOE-A boicotea el arranque del curso

En esta coyuntura, la vuelta a las aulas supone una prueba crucial de cuyo éxito dependerá en gran parte la evolución de la pandemia en Andalucía, ya que para mantener las buenas estadísticas de la primera ola es imprescindible que los centros escolares no se conviertan en focos de propagación de la enfermedad. En cualquier sociedad madura la gravedad de la situación bastaría para que las fuerzas políticas dejasen este asunto al margen de la contienda política. Pero en Andalucía la oposición no ha perdido la oportunidad de desgastar al Gobierno boicoteando el arranque del curso escolar para tratar de que descarrile y obtener así rédito electoral.

El PSOE ha activado sus terminales sociales para convertir la vuelta a las clases en un polvorín. Los sindicatos de profesores más próximos al partido han convocado paros, las asociaciones de padres afines han denunciado falta de seguridad y los ayuntamientos socialistas han decidido que si la Junta no afronta los gastos no limpia de forma especial los colegios, en un intento de descargar sobre la administración regional la responsabilidad de eventuales contagios. Ante este irresponsable desafío el Gobierno andaluz tuvo que emitir ayer un informe jurídico para recordar a los ayuntamientos que la competencia de la limpieza es estricta- mente municipal. Es lamentable que haya que recurrir a estos extremos cuando lo que demanda esta delicada situación es unidad y apoyo entre las administraciones.