Pellizcos de suerte en Sant Llorenç y en otros pueblos de Baleares

Además, se han vendido en el municipio mallorquín de Sant Llorenç des Cardassar seis décimos del tercer premio, que ha sido el número 04.211 . Dichos décimos fueron comprados en la localidad de Sa Coma, que pertenece a Sant Llorenç. Cabe recordar que dicho municipio fue el más afectado por las trágicas inundaciones que sufrió el noreste de Mallorca el pasado 9 de octubre. La Lotería de Navidad ha llegado también a otras localidades isleñas con otros premios.

Así, una parte de uno de los dos cuartos premios, el número 67.774 , ha recaído en tres localidades isleñas distintas. En concreto, una serie completa de dicho número fue vendida en una administración del municipio ibicenco de Santa Eulària. Ya en Mallorca, el citado cuarto premio se vendió en el Bar Delfín de la localidad de la Colònia de Sant Jordi y también en una administración de la barriada palmesana de Es Rafal Vell.

El citado establecimiento de Es Rafal Vell está hoy de enhorabuena por partida doble, pues también había vendido una parte de uno de los ocho quintos premios, en concreto el número 29.031 . Este último mismo número ha sido vendido, asimismo, en la localidad mallorquina de Cala Millor y en el municipio ibicenco de Sant Antoni. La localidad mallorquina de Manacor y la capital de Ibiza también se han visto agraciadas esta mañana, en ambos casos con otro de los quintos premios, en concreto el número 02.308 .

Cabe recordar que tanto en 2016 como en 2017 habían llegado ya varios pellizcos importantes de la Lotería de Navidad a Baleares, circunstancia que seguramente animó a los isleños a jugar de nuevo este año.

El año pasado, por ejemplo, se vendieron varias series del segundo premio en la isla mayor del Archipiélago, en concreto en las localidades de Sant Llorenç des Cardassar, Campos y Cala Millor. En la administración del primer municipio se vendió íntegramente en ventanilla una serie completa. Además, hubo también suerte con tres de los quintos premios. Así, uno se vendió en Manacor, mientras que otro llevó la felicidad a Sa Carroca, en Ibiza, y a la Colònia de Sant Jordi. El último se vendió en Palma y también en Formentera, en la parroquia de Sant Francesc de Formentera, que repartió entre sus feligreses y algunos vecinos un total de 3,5 millones de euros.

Por lo que respecta a 2016, una pequeña parte del segundo premio de aquel año se vendió en tres administraciones de Palma y en una de Calviá, por lo que Mallorca volvió a ser, una vez más, la isla más afortunada de Baleares a la hora de recibir premios de la Lotería de Navidad.