Venezolanos en España denuncian no poder registrarse para las elecciones: «Están violando nuestro derecho al voto»

De los ocho millones de venezolanos que han emigrado, se calcula que al menos la mitad ha superado la edad legal mínima para votar. Y esos cuatro millones deben asistir a las sedes consulares de los países en los que se encuentran para poder registrarse o actualizar sus datos, pero en distintas latitudes del mundo, los venezolanos han denunciado que las autoridades del país no han facilitado el proceso para hacerlo.

Este viernes, venezolanos protestaron frente al consulado de Venezuela en Madrid, donde no dan respuesta a sus demandas. Incluso una de las manifestantes ha llegado con un cartel anunciando que comenzará una huelga de hambre «por nuestro derecho al voto».

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«El CNE estableció una jornada especial de registro que empezaba este lunes, y nosotros hemos venido todos los días para que la gente pueda registrarse y no nos dan respuesta. Nos dijeron que las máquina estaba dañada. La gente quiere inscribirse para poder votar», dice Ligia Contreras, una venezolana y militante del partido opositor Primero Justicia que acudió a la protesta. Contreras llegó hace 20 años a España y pudo actualizar su padrón electoral con facilidad: presentaba unos requisitos y enviaba unos datos por internet. Por eso no entiende cómo puede ser tan complicado, dos décadas después, habilitar el proceso.

Hay una red de venezolanos organizada en el exterior, comenta David Iturriago, jefe de campaña del comando de María Corina en España. A lo largo y ancho de España se organizan en las ciudades donde hay sedes consulares, como Madrid, Bilbao o Barcelona, o también otras donde no hay consulados, como Valencia, pero sí una enorme cantidad de venezolanos.

«Hemos decidido organizarnos para exigir nuestro derecho a votar. Las excusas son varias. En los consulados dicen que no activaban el registro porque esperan instrucciones del CNE, el mismo organismo que ya estableció como fecha de inicio el 18 de marzo, y se nota que hay poca voluntad de que se abra, violando nuestro derecho a votar». «Todos los días nos hemos acercado al consulado, y ya hemos perdido cinco de los días establecidos para el registro, pero vamos a seguir exigiendo que dejen inscribirnos. Tenemos que presionar, porque, si no lo hacemos los venezolanos, ¿quién lo va a hacer?».

Dependiendo de la ciudad, las excusas que otorgan los funcionarios venezolanas son variadas. Según Iturriago, a los venezolanos en Bilbao le dijeron que la máquina había llegado, pero que España las tenía retenidas en aduanas. «Todos los días dicen algo distinto».

Johanna Márquez, parte de la coordinación del comando de campaña de MOM (Mundo Organizado con María Corina), la plataforma de venezolanos que apoya a la opositora en el exterior. «No nos dan información del proceso. Hemos estado viniendo al consulado desde el lunes a primera hora. A las ocho de la mañana no teníamos información. Nosotros estamos conectados con las otras ciudades y a las 10 am, en Vigo, les dijeron que las máquinas no habían llegado por las sanciones. Luego a las 10:02, los otros consulados comenzaron a decir lo mismo. Intentamos entregar una carta a la cónsul para pedir una cita para que nos explicará en qué podemos ayudar. Pero nos dijeron que no se pueden recibir cartas. Tiene que ser enviado por correo postal. Así que envíanos el miércoles un burofax directamente al consulado. También solicitamos citas online, sin respuesta. Y estamos perdiendo tiempo. No pedimos que nos atienda el cónsul, sino cualquier trabajador. No hay declaraciones del Gobierno».