Milei revoluciona la batalla por la Casa Rosada en Argentina

El escenario para las elecciones que tendrán lugar en dos meses en Argentina se aleja de los pronósticos de las encuestadoras previos a las urnas, que daban como fuerza ganadora al partido oficialista Unión por la Patria (UP), que se ubicó en los resultados apenas en una tercera posición. En cambio, la vicepresidenta Cristina Kirchner -que ha brillado por su ausencia en las elecciones de este domingo- había acertado sus predicciones tres meses atrás, cuando dijo en la televisión local que la elección del mes de octubre sería «una elección de tercios», refiriéndose a tres fuerzas que se enfrentaran en las urnas, con un 30% del electorado a su favor, lo cual se asemeja al escenario actual. De hecho, Libertad Avanza, el partido del candidato Javier Milei, obtuvo un 30% de los votos, seguido por el opositor Juntos por el Cambio (28%) y el oficialista Unión por la Patria (27%).

El impacto de la sorpresa electoral, alejada de la mayoría de los pronósticos preelectorales, tuvo un efecto inmediato en el mercado. En la mañana del lunes, los bonos argentinos se derrumbaron en Wall Street como reacción a los resultados de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la devaluación del peso argentino se acentuó en las horas posteriores a los comicios. A la ya delicada situación económica en Argentina –con una inflación anual que supera el 115%- se suma ahora el impacto del escenario poselectoral en la moneda local, que agudiza los desafíos que tendrá por delante Massa en los próximos dos meses, que a su campaña electoral de cara a octubre deberá sumar ahora el hecho de lidiar con el drama que se agrava en materia de economía en un país con casi un 40% de pobreza.

El candidato del oficialismo, Sergio Massa, resultó el segundo en cantidad de votos pese a que su partido, Unión por la Patria, estuvo lejos de los resultados esperados. El político fue el último en dar su discurso, pasada ya la medianoche del domingo, y en su mitin de campaña realizó una invitación a las alianzas, con el objetivo de sumar apoyos y mejorar los resultados de cara a octubre. «Tenemos 60 días para dar vuelta esta elección», alentó el candidato y prosiguió: «Quiero convocar a nueva mayoría. Como Néstor (el fallecido expresidente Kirchner) cuando convocó a la transversalidad, abrazar a los radicales, a los sectores del campo popular».

La apuesta del actual ministro de Economía es, en las próximas semanas, poder hacerse con los votos que fueron para el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta –quien fue eliminado este domingo por su compañera de partido, Patricia Bullrich-, y de la izquierda, diseminada en múltiples formulas partidarias. La otra esperanza de Massa reside en convencer a parte del 30% de los argentinos que no se presentaron a votar este domingo para que asistan a las urnas y le otorguen su voto. Para un país como Argentina, un 70% de participación en los comicios es un porcentaje muy bajo y da cuenta del desencanto que hay por las figuras políticas.

Si bien el oficialista Unión por la Patria hizo una buena elección en la alcaldía de Buenos Aires –que también se votaban este domingo-, a nivel nacional fue inocultable la decepción en el mitin del partido. Una derrota que, además, se caracterizó por dos grandes ausencias: la de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y la del presidente Alberto Fernández . Ninguno hizo acto de presencia en la noche del domingo para apoyar al candidato de su partido.

Muy distinto fue el escenario en el mitin de campaña de la alianza Juntos por el Cambio (JXC), cuya figura central es el expresidente Mauricio Macri y en la cual dos candidatos competían este domingo: el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y Patricia Bullrich –esta última resultó vencedora por una diferencia del 7%-.

Allí el exmandatario Macri, que en las últimas semanas había restado apoyo a Larreta, se hizo presente en la noche electoral. Tras darse a conocer la victoria de Milei, el expresidente publicó una carta en sus redes sociales en la que celebró los resultados de las elecciones. «Argentina entra en un cambio de era», pronosticó el político. «Sumando los resultados de Javier Milei y los nuestros, es enorme esta mayoría de argentinos que planteamos un cambio profundo como no existió en décadas», escribió el empresario, refiriéndose al ejercicio de los políticos en los últimos años, en los que también él pasó por la Casa Rosada.

Cabe recordar que el expresidente mantiene con Milei una relación cordial –de hecho, el economista aseguró que el empresario fue el único candidato que lo felicitó tras los resultados-, aunque el ganador de las primarias ha descartado este lunes la posibilidad de una alianza con Macri. En diálogo con Radio La Red, el candidato de Libertad Avanza aseguró que un acuerdo con el partido Juntos por el Cambio «es imposible« dado que, en su opinión, «tienen elementos dentro de su estructura que son absolutamente inviables». En la previa a las elecciones del domingo, el candidato de Libertad Avanza había recibido también, a través de redes sociales, el apoyo del expresidente brasileño Jair Bolsonaro.

Finalizadas las elecciones primarias, el gran interrogante en este momento tiene que ver con los movimientos de ajedrez que se esperan en los próximos meses por parte de los principales candidatos a la Presidencia argentina. Si bien hasta la mañana del lunes Cristina Fernández de Kirchner no se había pronunciado sobre los resultados electorales, en sus acertadas predicciones del mes de mayo había afirmado que «lo importante, más que el techo, es el piso. Lo importante es entrar al ballotage».

Llegar a una segunda vuelta es el objetivo principal del kirchnerismo hoy y, para ello, necesita aliados. Por su parte, el vencedor del domingo, Javier Milei, tiene una fe ciega en que no se llegara a una segunda vuelta en octubre. En su discurso de celebración del domingo por la noche y a los gritos, el candidato que salió airoso de los comicios alentó a sus seguidores: «Estamos en condiciones de ganarle a la casta en primera vuelta».