Meloni califica de «injerencia inaceptable» que una ministra gala diga que «vigilará» al nuevo gobierno italiano
La polémica la levantó la titular de Exteriores al decir que estará atenta al respeto de los derechos y las libertades. Mattarella y Draghi han expresado su malestar y han dicho que su país sabe cuidarse solo
La líder de Hermanos de Italia, el paado día 3 de octubre, a su llegada a la Cámara
Con cierta rabia, Giorgia Meloni, líder de Hermanos de Italia, ha rechazado lo que considera «injerencias» de Francia en Italia. Laurence Boone, ministra francesa de Asuntos Europeos, declaró en una entrevista a La Repubblica que París «vigilará» al nuevo gobierno italiano: «Queremos trabajar con ... Roma, pero vigilaremos el respeto de los derechos y las libertades» y «estaremos muy atentos al respeto de los valores y reglas del Estado de Derecho». Esta declaración de Laurence Boone reproduce la misma idea expresada hace unos días por la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, tras la victoria del bloque de derechas en las elecciones del 25 de septiembre.
La réplica de Meloni a Laurence Boone ha sido inmediata: «Confío en que el gobierno francés desmienta estas palabras, que se asemejan demasiado a una inaceptable amenaza de injerencia contra un Estado soberano, miembro de la UE. Se acabó la era de los gobiernos dirigidos por el Partido Democrático pidiendo protección en el exterior; espero que sea claro para todos, en Italia y en Europa», ha escrito la primera ministra italiana «in pectore» en Facebook.
Sobre la supuesta «vigilancia» extranjera sobre el nuevo gobierno que encabezará Meloni se ha pronunciado el presidente de la República, Sergio Mattarella. Al ser preguntado por un periodista sobre el tema de la injerencia extranjera, el jefe del Estado ha dado una breve y clara respuesta: «Italia sabe cuidarse, con respeto de su Constitución y los valores de la Unión Europea».
También el primer ministro en funciones, Mario Draghi, ha tenido que responder, tras el Consejo Europeo informal en Praga, a la pregunta de si ha percibido reservas sobre el futuro gobierno italiano. Draghi ofreció seguridades sobre la política exterior, al tiempo que explicó que hay curiosidad, pero no preocupación: «Cuando hay un cambio de gobierno hay mucha curiosidad, pero no preocupación. Hay respeto por la elección de los italianos y curiosidad por saber cómo evolucionará el gobierno, pero en política exterior la línea de Italia debería ser la misma».
Macron: «No es Francia quien elige al primer ministro»
Por su parte, el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, al final del Consejo Europeo en Praga, respondiendo a una pregunta sobre el futuro gobierno italiano y las relaciones con Francia, expresó su confianza en Mattarella: «No es el presidente de Francia quien elige al primer ministro italiano -dijo Macron-. Es el fruto del resultado del voto del pueblo italiano y será designado de acuerdo con la Constitución italiana por el presidente de la República, Sergio Mattarella. Trabajaré con la persona indicada, que será fruto del resultado de las elecciones, y trabajaré con la mejor voluntad, pero tampoco cambiaré mis valores y mis principios. Hasta ahora, siempre he sabido avanzar», concluyó Emmanuel Macron.
Después de la dura reacción de Meloni, el gabinete de Laurence Boone ha aclarado que la ministra francesa de Asuntos Europeos no tenía intención de dar lecciones a nadie y que «Francia respeta la elección democrática de los italianos».
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Las palabras de la ministra francesa de Asuntos Europeos no solo han irritado a Giorgia Meloni, sino que también han creado malestar en algunos políticos italianos. «Meloni tiene razón , los franceses se deben ocupar de sus asuntos, no tienen nada que vigilar, si hay una cuestión relativa al estado de derecho, se encarga la Unión Europea», ha dicho Carlo Calenda, líder de Azione, partido centrista liberal, calificando como «inapropiadas» las palabras de la ministra francesa, porque en Italia «hay pleno estado de derecho».