Los Lobos de la Noche de Putin recorren Berlín en una «marcha de la victoria»
Desde Moscú hasta Berlín, moteros fieles a Putin rinden homenaje al Ejército Rojo
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Corresponsal en Centroeuropa
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Iniciar sesiónArrancaron el sábado, desde Moscú, y recorrieron en moto los casi 2.000 kilómetros que separan las capitales rusa y alemana para rendir homenaje ayer, como cada año en la misma fecha, al Ejército Rojo que venció a los nazis. Son los «Nachtwölfe» (Lobos de ... la Noche), varios cientos de moteros fieles a Putin que celebran una «manifestación patriótica» que comienza tomando las calles de Moscú con el rugido de sus motores y termina en Alemania, en los monumentos conmemorativos que se conservan en Berlín y Brandemburgo.
Su presencia ha venido siendo tolerada como otras muestras locales de nostalgia, hasta que el año pasado sus banderas rusas y soviéticas, con la invasión rusa de Ucrania ya en marcha, resultaron ofensivas. Por eso el Tribunal Superior Administrativo de Berlín había prohibido para este 9 de mayo las banderas y símbolos rusos y soviéticos, así como las cintas de San Jorge y la exhibición de la letra «Z».
Nada impidió, sin embargo, que unos quince destacados «Nachtwölfe» visitasen ayer a primera hora de la tarde el Parque de Treptow, inaugurado en 1949 en la zona rusa, donde permanecen enterrados 7.000 soldados rusos que cayeron en la toma de Berlín y que, bajo una gigantesca estatua de un soldado con un niño en brazos, custodia una llama eterna. A su llegada, los fornidos moteros fueron vitoreados por varios cientos de manifestantes pro-rusos que profirieron insultos a Ucrania y a los países que la apoyan, lo que indignó a decenas de alemanes también presentes y dio lugar a enfrentamientos verbales y algún que otro agarrón. «¡Ya vencimos una vez al fascismo y volveremos a hacerlo!», gritó Alexander Zaldastanov, conocido como «El Cirujano» y líder de la agrupación, «nuestra aspiración a la victoria es eterna».
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Zaldastanov se declara «amigo personal» de Putin y es objeto de sanciones occidentales. En mayo de 2015, se le prohibió ingresar a Polonia, donde quería organizar «un rally de la victoria». Los simpatizantes que le esperaban habían participado en una marcha conmemorativa desde la Puerta de Brandemburgo y a través de la Calle del 17 de Junio. Cuando llegó al monumento, el embajador ruso en Berlín, Sergei Nechayev, ya había depositado su ofrenda floral y se había marchado a un segundo acto en el Memorial Soviético, en Tiergarten, al que una «avalancha» intentó acceder y en el que la policía impidió el paso a grupos no autorizados.
Tres activistas pro-Ucrania, que se plantaron a las puertas de homenaje con banderas, fueron insultados al grito de «Nazis Fuera» y la policía confiscó banderas rusas y parafernalia soviética que prometía devolver posteriormente. «La policía está deshonrando a nuestros padres», se quejaba una mujer con claveles rojos en la mano y a la que fueron decomisados una bandera y una gorra de uniforme militar soviético, «estos controles son ridículos, nos tienen miedo, venimos a traer flores, no vamos a destruir nada».
El resto de los «Nachtwölfe» se repartieron por los numerosos monumentos que perviven en el territorio de lo que fue la Alemania comunista, la RDA, alguno de cuyos líderes acudieron también a los actos, como Egon Krenz. Después circularon por la B96 desde Selchow, a través de Tempelhofer Damm, hasta el centro de Berlín, una presencia amenazante para muchos berlineses.
«No entiendo por qué se permite esto, ¿dónde está la policía?», criticaba una profesora de primaria a la salida del colegio. «Es una provocación en toda regla, hay una dejación por parte de las autoridades», comentaba un dentista al que sorprendió la caravana, que en esos momentos exhibía una bandera no confiscada en la que se podía leer «Donbas es nuestro» escrito en ruso. El canciller Olaf Scholz, a esa misma hora, acusaba a Putin ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo de haber desplegado sus soldados, tanques y misiles para atacar a un país socio y amigo. «¡No nos dejemos intimidar por tal postura de poder! Permanezcamos firmes en nuestro apoyo a Ucrania», arengó el canciller alemán.
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