Presentan ante la ONU un informe con más de cien casos de tortura en Cuba

La información fue extraída directamente de las víctimas, sus familiares, compañeros presos y/o allegados directos siempre y cuando fueran testigos,  siendo corroborada y cotejada con las bases de datos que posee la organización. En el estudio predominan los civiles independientes, profesionales y cuentapropistas   que nunca habían ejercido activismo y fueron detenidos por manifestarse contra el régimen cubano el 11 de julio (11J) de  2021.

Entre los 15 patrones de tortura y malos tratos identificados se hallan: la privación de la atención médica, de líquido o alimentos, así como del sueño; trabajo y tareas forzados, confinamientos en solitario como forma de castigo, agresiones físicas, desorientación intencionada, privación de comunicación con familia, defensa y allegados; amenazas a su integridad y seguridad, tanto la de los reos como la de sus seres queridos; humillación, degradación y maltrato verbal.

Aunque actualmente PD registra 1.167 presos políticos en la isla , apenas ha podido presentar una muestra de 101 casos de tortura debido a numerosas dificultades que ha tenido que enfrentar para documentar los casos como la ausencia de mecanismos de reporte de las autoridades sobre los encausados, la prohibida presencia de ONG internacionales de Derechos Humanos en la isla, e incluso las relatorías de derechos humanos de las  Naciones Unidas, así como el miedo extendido en la población a hacer denuncias de este tipo.

Del total de víctimas, tres eran menores de edad en el momento de la detención, y 14 tenían 21 años o menos. De estos, el joven de 17 años, Jonathan Torres Farrat, es el que mayor número de torturas acumula (al menos 8 de los 15 patrones). La víctima con la mayor intensidad de las torturas es el líder de la Unpacu José Daniel Ferrer García , de 51 años, quien «está  recibiendo ataques sónicos constantes desde hace 260 días, a lo que se suma ahora un  envenenamiento químico desconocido, y que está encerrado todo ese tiempo aislado, y en una celda  de castigo preparada tecnológicamente para estas torturas. Su degradación física y psicomotriz es  paulatina debido a esta tortura constante destinada a asesinarle lentamente». 

Según PD, pese a que Cuba ha firmado y ratificado la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura y Otros  Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, desde 1995 hasta la fecha «no ha sido en grado alguno real compatibilizada su legislación penal interna para sancionar conductas relativas a este flagelo». 

El índice de torturas en la isla se ha incrementado significativamente a raíz de las masivas protestas antigubernamentales acaecidas el 11-J, exhibiendo la isla «los índices de represión más  altos registrados en décadas con miles de detenciones arbitrarios, centenares de convictos de  conciencia, así como centenares de reportes de torturas, especialmente contra activistas, opositores  y sus familiares, pero también contra los civiles manifestantes que fueron procesados por ejercer la  libertad de expresión pacíficamente, y contra sus familias».

El informe de denuncia será revisado por el Comité conra la Tortura en su próximo período de sesiones, entre el 19 de abril y el 13 de mayo próximo.