«No volveré a atender a otro americano sin seguro médico, incluyendo mi hija»

"Gracias a Dios. Como enfermero, no volveré a ponerme malo cada vez que atiendo a otro americano sin seguro médico, incluyendo mi hija", dice Dave desde un pueblo de Nueva York en uno de los más de 1.400 comentarios sobre este tema que llenan la web de " The New York Times ". "¡ Qué gran día para este país . Gracias a los demócratas que no se han dejado ganar por las repulsivas tácticas de algunos republicanos en el Congreso, que querían convertir esta reforma en el Waterloo de Obama", añade Kelly desde la Costa Oeste.

"¿Cuándo comenzará la gente a entender que el seguro médico es un derecho y no un privilegio ? Eso debe quedar claro. Y desde luego no es una entidad para ganar dinero, como nuestro actual sistema defiende. Tampoco somos el mejor sistema del mundo, como algunos nos quieren hacer creer. Tenemos unas cifras desastrosas en áreas como la mortalidad infantil", recuerda Leslie, de Brooklyn. "Como obstetra en hospitales públicos, la mayoría de mis pacientes no tienen seguro. Pregúntate a tí mismo: si alguien que conoces nace con una anomalía o una enfermedad que se manifiesta más tarde, las compañías de seguros pueden denegarle la cobertura cuando más lo necesita. Y eso es sencillamente inmoral".

Frank, de Michigan, también cree que "por fin un derecho básico estará ahí para todos. Es una responsabilidad fundamental para nuestro gobierno: promover el bienestar de sus ciudadanos. Está en la Constitución".

"¡Obama NO es el FDR de su generación!"

Muy diferente es la opinión de JG, Washington, que señala: "¡NO, NO, NO! ¡Perdonen pero Obama NO es el Franklin D. Roosevelt de su generación! Nadie dice que nuestro sistema no sea malo y que no necesitemos reformarlo, pero lo que NO NECESITAMOS es un programa multimillonario que endeudará a muchas generaciones en un momento en el que luchamos por llegar a fin de mes".

Otro lector del estado de Washington cuenta su historia: " Estoy en diálisis porque durante muchos años no tuve seguro médico . No me pagaron lo que me debían y no pude pagar un seguro en un momento en el que tenía diabetes, hipertensión y sólo un riñón funcionando. Después de un año y medio sin ir al médico conseguí de nuevo cobertura, pero para entonces ya tenía una enfermedad crónica en el riñón por no haber recibido tratamiento", lamenta este lector. "Ahora paso la mitad de mi tiempo en diálisis, pero nada de esto habría sido necesario si hubieran aprobado antes la reforma sanitaria. ¡Menos mal que ahora todos los americanos tendrán derecho a la atención médica!".

Jarod explica en " Los Angeles Times " que como hombre mayor de 50 años que gana menos de 50.000 dólares al año, "no me gusta que alguien que no es médico decida por mí, no aprecio que me digan, como un hombre libre que soy, que debo comprar algo que no necesito. Nunca he dependido del gobierno para mi bienestar y así seguirá siendo : seguiré cuidado de mí mismo. Ojalá que esta debacle fracase".

En la BBC , Elsbeth Teague, de Asheville (Carolina del Norte), subraya: "puede que esta reforma haga una pequeña diferencia para algunos, pero para mí será muy grande. Tengo 21 años y me quedan dos meses para graduarme en la universidad. En ese momento perderé mi seguro médico. Sufro trastorno bipolar y necesito tomar unas medicinas que cambiaron mi vida. Me estabilizan y sin ellas sería un infierno. No sé cómo las pagaría si la reforma no se convierte en ley, porque no puedo permitirme los 500 dólares mensuales que me costaría el seguro privado".

Los mensajes en la Fox

Los que viven uno de sus peores días son los votantes más conservadores, fieles a la cadena " Fox ". Allí los mensajes no son de agradecimientom sino de furia. "Hoy mismo voy a sacar todo mi dinero de los bancos. Si todos los americanos responsables que odian a este gobierno lo hacen, quizá empiecen a escuchar a la gente que maneja el dinero en este país. Pondré el mío en una caja y que me metan en la larga lista de morosos porque mi marido perdió su trabajo ayer.... Gracias por ayudarme a tomar esta decisión", dice una mujer desde Florida. "¿Qué será lo próximo, legalizar a los 32 millones de ilegales que no tienen seguro médico?", se pregunta otro espectador de la cadena más conservadora de EE.UU. "Este es el primer paso para destruir la Constitución. ¡Parémoslo! ¡ Recordadlo en noviembre !", señala un americano de Georgia en referencia a las elecciones legislativas del 2 de noviembre. "Qué día más triste. Ya no tenemos un gobierno que nos representa", se quejan desde Ohio. "La mayoría de los americanos se opone a esta reforma, pero la élite ha decidido por nosotros. La única forma para que esto funcione es que todos estemos sanos y no nos hagamos mayores. Mi más sentido pésame a las futuras generaciones : os dejaremos un país que no podréis reconocer. Creedme, hubo un tiempo en que esta nación hacía lo que debía y estar orgulloso de ser americano era algo bueno...".