Fantasmagórica compra del diario opositor venezolano «El Universal»

Tras meses de rumores y secretismo, el anuncio oficial de la adquisición se produjo el pasado viernes. Ante la perplejidad de muchos venezolanos, Abreu Anselmi señaló que los nuevos accionistas respetarán la línea editorial, desmintió «vínculos con el chavismo» y dijo que «el producto sigue siendo el mismo: una palestra donde las diferentes tendencias políticas nacionales tienen su respiradero».

El jefe de Información del diario, Elides Rojas, un destacado periodista crítico, aseguró por su parte que no habrá despidos de profesionales ni de articulistas, y que no dependerán de la concesión de divisas para importar papel porque comprarán los dólares en el mercado paralelo.

La misma promesa de respetar la plantilla y la libertad de expresión se hizo el año pasado al negociar la venta del canal informativo Globovisión y del grupo editorial de la Cadena Capriles . Sin embargo, pocos meses después, sus respectivas direcciones despidieron a los profesionales críticos y se mostraron abiertamente chavistas.

La venta de «El Universal» ha desatado la polémica. El secretario de la Universidad de Carabobo, Pablo Aure, declaró al respecto que «nos causa mucha suspicacia que una empresa española se haya preocupado por invertir en Venezuela y precisamente en un medio de comunicación», uno de los negocios más acosados por la mordaza y la escasez de papel. Según las investigaciones de Aure, la empresa Epalisticia SL, «fue registrada el año pasado en Madrid, con un capital social de 3.500 euros, y luego en mayo de 2014 otra empresa (Tecnobreaks INC) compró la totalidad de las acciones para convertirse en el único dueño».

Al secretario de la Universidad de Carabobo no le cuadra la diferencia entre el capital social de la empresa y el tamaño de la compra de «El Universal», que valora en 90 millones de euros. «Pareciera que alguien se interesó en disfrazar la compra desde España», subrayó. En el registro mercantil de Madrid, Epalisticia está domiciliada en el Paseo del Pintor Rosales número 18, comenzó sus operaciones el 24 de julio de 2013 y su objeto social es «la compra, venta, alquiler, parcelación y urbanización de solares, terrenos y fincas de cualquier naturaleza… la inversión y administración de medios de comunicación, en especial, en mercados emergentes, con el fin de desarrollar nuevos modelos de digitalización de noticias nacionales e internacionales». Eduardo López de la Osa Escribano figura como presidente de la compañía y José Antonio de la Torre López como secretario.

Otro hecho insólito es que el 25 de marzo de 1998 «El Universal» publicó la información sobre la estafa del Banco Latino —titulada «Los esfuerzos por capturar a Gómez López»— en la que Jesús Abreu Anselmi aparece como prófugo de la Justicia , entre otras 21 personas involucradas. «En la historia judicial del país, el Banco Latino tiene no sólo el dudoso honor de ser la institución con mayor número de administradores procesados penalmente, sino además con la mayor cantidad de solicitudes de extradición», señaló entonces el diario.

El nuevo presidente de «El Universal» trabajaba antes en la emisora FM Center. Es ingeniero civil, hermano del presidente del Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, José Antonio Abreu, y respalda abiertamente a Nicolás Maduro.

«El Universal» fue fundado en 1909 por el poeta venezolano Andrés Mata. A su muerte, la dirección del diario fue asumida por su hijo Andrés Mata Osorio.

En los últimos dieciséis meses, han cambiado de manos el canal de noticias Globovisión -vendido a un grupo de empresarios venezolanos- y el grupo editorial de la Cadena Capriles, adquirido el año pasado por la corporación Latam Media Holding, propiedad de la empresa Hanson Group de Inglaterra.

«El Nacional» es el único diario que no ha caído en las garras chavistas, aunque ha recibido numerosas presiones: multas, sanciones y no le conceden dólares para la compra de papel. Su presidente-editor, Miguel Henrique Otero, ha resistido los embates. «Maduro quiere que desaparezca la prensa crítica en Venezuela» , señaló Otero en una entrevista a ABC. «El Nacional» -afirma- ni se compra ni se vende.

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