La salud de Kate Middleton y Carlos III obliga a Buckingham a reaccionar

Lo curioso de la situación no es sólo la salud de los miembros de la familia real, sino la manera en que se ha manejado la información personal ya que los Windsor rara vez comentan públicamente sobre sus asuntos privados. Sin embargo, en esta ocasión, se lanzaron dos comunicados en un lapso de 90 minutos el pasado miércoles, rompiendo con la tradición de mantener la privacidad en asuntos médicos. La princesa Kate, de 42 años, fue ingresada en un hospital privado de Londres para una cirugía abdominal planificada, según confirmó el Palacio de Kensington, y aunque no se dieron detalles adicionales sobre su «información médica privada», el palacio indicó que no tiene relación con el cáncer y que la operación, realizada el martes, fue considerada un éxito por los médicos. Poco después de este primer anuncio, el equipo de prensa del Palacio de Buckingham emitió otro comunicado anunciando que el monarca ingresará a un centro médico la próxima semana.

La última vez que se vio al Rey y a Kate juntos fue en el día de Navidad en la residencia de Sandringham, donde asistieron al servicio matutino tradicional en la iglesia. Desde entonces, ella no ha sido vista en actos oficiales, y el monarca ha sido raramente visto en público. La recuperación de la esposa del heredero implica que este tampoco estará trabajando durante los días que ella pase en el hospital y sus primeros días en casa. El Rey, por su parte, ha decidido hacer público su tratamiento para la próstata, destacando su deseo de alentar a otros hombres a realizarse chequeos médicos, una decisión que ha sido elogiada por, su sinceridad y apertura, por las organizaciones benéficas relacionadas con la próstata, como Prostate UK. De momento, no se sabe cuándo retomará sus deberes reales. Mientras que el Rey pospondrá sus compromisos públicos «por un breve período de recuperación», la cirugía de la princesa será más debilitante. Se espera que permanezca en el hospital entre 10 y 14 días y no se espera que regrese a los compromisos públicos hasta después de la Pascua.

Que tres miembros principales de la realeza tengan que posponer sus compromisos por varios días o incluso más tiempo, ya que la pareja real no hará viajes internaciones en «varios meses», no es exactamente la manera en la que esperaban comenzar el nuevo año, pero la forma en que la Casa Real manejó la situación ha sido elogiada por prensa y público, que han aplaudido el enfoque más «abierto y humano».

Por otro lado, se ha revelado que el Príncipe Harry podría no haber sido informado sobre la condición de salud de su padre antes de que la noticia se hiciera pública. Cuando se emitió el anuncio, el menor de los hijos de Carlos y la fallecida princesa Diana se encontraba en su residencia de California con su familia.

La Reina Camila declaró el jueves que el Rey se encuentra «bien» y «ansioso por volver al trabajo». Ella, de momento, sigue con su agenda. Joe Little, de la revista 'Majesty', aseguró que los problemas de salud han agravado el problema que enfrenta el pequeño grupo de miembros activos de la realeza. «Los miembros activos de la familia real han estado bajo presión para mantener el nivel de compromisos asumidos por un equipo mucho más grande en años anteriores», explicó, por lo que «eliminar de repente a tres de los jugadores más importantes debido a problemas de salud complica considerablemente el problema, pero al menos el Rey estará fuera de acción solo por un período relativamente corto».