El Rey Carlos III y la Princesa Catalina continúan ingresados en The London Clinic

El Rey, que recibió el diagnóstico de que sufre un agrandamiento de próstata el 17 de enero mientras se encontraba en Birkhall, Escocia, es un miembro más de los «royals» británicos que es atendido en este centro, que fue fundado en 1932 por un grupo de médicos de la famosa calle de la capital donde están los mejores servicios médicos, Harley Street, con la idea de establecer un hospital que elevara los estándares de atención a los pacientes. Desde entonces, la clínica se ha convertido en un símbolo de excelencia médica, y además de ser el hospital de confianza de la Familia Real, con figuras como el Príncipe Felipe o la Princesa Margarita entre sus pacientes, la clínica ha atendido también a prominentes figuras del escenario mundial como la actriz Elizabeth Taylor, que se operó allí una rodilla en 1963 tras caerse durante la filmación de una película, o el que fuera presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, que en 1947, cuando era miembro del congreso, fue diagnosticado con la enfermedad de Addison en este centro. Otros datos curiosos incluyen el nacimiento del ex primer ministro David Cameron, actual ministro de Exteriores, en esta clínica en 1966; y en octubre de 1998, mientras se encontraba internado en la London Clinic producto de una operación por una hernia lumbar, fue detenido el dictador chileno Augusto Pinochet acusado de crímenes contra la humanidad tras una la orden de captura internacional dictada en su contra por el juez Baltasar Garzón.

Su reputación se basa en una oferta de servicios médicos de alta gama, desde tratamientos de radioterapia CyberKnife hasta tecnología SpyGlass para endoscopias, así como terapia inmunológica CAR-T para pacientes con cáncer. En 2019, la clínica inauguró un centro especializado en cirugía robótica, consolidando aún más su posición como líder en innovación médica y según su página web, se especializa «en el cuidado y tratamiento de condiciones médicas complejas, como el cáncer, la salud de las mujeres, la urología y la ortopedia (huesos y articulaciones)».

Pero la calidad de los servicios no se limita al ámbito médico. Los pacientes de The London Clinic disfrutan de un servicio de conserjería exclusivo que permite a los pacientes o a sus acompañantes reservar tours, espectáculos teatrales o restaurantes en la capital. Además, las personas ingresadas disfrutan de una experiencia gastronómica muy por encima de los estándares hospitalarios. Su chef, Paul O'Brien, fue reconocido en el 2021 por su apoyo a los pacientes durante la pandemia de Covid-19, tras haber liderado un equipo que proporciona comidas personalizadas utilizando ingredientes de granjas ubicadas en los alrededores de Londres.

La historia de la clínica está entrelazada con la historia de la familia real desde hace más de 90 años, ya desde que fue inaugurada oficialmente por los entonces Duque y Duquesa de York en 1932, otros miembros de la Familia Real han participado en algunos de sus eventos más significativos, incluyendo la apertura del departamento de fisioterapia por el actual Rey cuando era Príncipe de Gales.

La última inspección realizada por la Comisión de Calidad de Atención en junio de 2021 la calificó como «buena» en general, y destacó su capacidad para tratar 155 condiciones médicas y así como sus servicios de cirugía, diagnóstico y tratamiento de enfermedades. La clínica, que atiende a aproximadamente 23.000 pacientes hospitalizados y 110.000 pacientes ambulatorios al año, cuenta en su edificio ubicado en el número 20 de Devonshire Place con siete quirófanos principales y tres quirófanos adicionales, así como seis salas especializadas para cirugías en urología, ginecología, cirugía torácica, ortopedia y procedimientos espinales. Y aunque no proporciona un registro público de sus tarifas para cada operación, sí comparte los costos estimados de algunos procedimientos, como por ejemplo la cirugía de reemplazo de rodillas cuyo coste empieza en las 15.360 libras esterlinas.