Muere a los 80 años Alfonso de Borbón y Escasany, primo segundo del Rey Juan Carlos I y suegro de Eugenia Silva

«La trayectoria profesional de don Alfonso de Borbón y Escany ha sido impecable», recordaba 'Look'. Jubilado desde hacía cuatro años, estuvo ejerciendo como consejero en la compañía francesa AXA. También fue el máximo accionista de Keka, donde consiguió un 59.49% del proyecto. Esta sociedad inmobiliaria estuvo a punto de salir a bolsa en 2016, aunque finalmente no fructificó.

Marisa Yordi y Alfonso de Borbón y Escasany se casaron en 1971 y su nombre ocupó entonces muchos titulares de la crónica social del momento. Eran conocidas las relaciones de la aristócrata con muchas personas poderosas de diferentes ámbitos, y especialmente de la alta sociedad, con nombres tan relevantes como los de Cari Lapique o Isabel Preysler, con quienes todavía mantiene amistad.

La prueba de que Eugenia Silva mantenía una magnífica relación con su suegro fue su mensaje de recuerdo y carió hacia su suegro a través de unas emotivas palabras publicadas en sus redes sociales. «Te vamos a echar mucho de menos, querido Alfonso», ha escrito la modelo junto a un corazón roto y una emotiva imagen del abuelo con uno de sus nietos.

«El primo segundo de Juan Carlos I ha fallecido en Madrid, dejando una huella imborrable en su familia. Son un clan unido, fuerte y saldrán adelante gracias al apoyo que se darán unos a otros», ha asegurado 'Look' al dar la noticia.

Según ha avanzado posteriormente 'Vanitatis', los restos mortales de Alfonso de Borbón y Escasany se han trasladado al tanatorio de Tres Cantos y está previsto que durante la tarde se celebre una liturgia en la capilla del cementerio de La Paz.

Alfonso de Borbón y su mujer, Marisa Yordi, formaron una de las parejas más estables y glamurosas del panorama social hasta el año 2000, cuando decidieron retirarse por completo de fiestas, eventos y vida social. El hijo del mismo nombre es la pareja de Eugenia Silva y padre de sus hijo.

El primo segundo del padre de Felipe VI tenía muy buena relación con toda la Familia Real y de hecho acudió junto con su mujer a las bodas de los tres hijos de Juan Carlos I y doña Sofía.

«Estaba considerado como un gran profesional con una importante capacidad para organizar equipos. En los últimos años, y una vez retirado, se dedicaba a vivir la vida y disfrutar de sus dos hijos y de los nietos», ha señalado 'Vanitatis'.