Ropa de segunda mano y probadores inteligentes: así es la renovada tienda de H&M en plena Gran Vía de Madrid

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Con un concepto completamente transformado que aúna innovación tecnológica y una experiencia de cliente más personalizada, entre las principales novedades destaca la llegada por primera vez a Madrid del espacio 'Pre-loved', una sección dedicada a la moda de segunda mano cuidadosamente seleccionada en la que se encuentran tanto prendas de colecciones especiales de H&M como otras de marcas de lujo como Escada, Moschino o Dolce & Gabbana, entre otros.

«Tras su éxito en ciudades como Barcelona o París, este rincón de moda circular aterriza en la capital con una curaduría exclusiva de prendas de grandes firmas, accesorios con historia y algunas de las piezas vintage más icónicas de H&M», explica Sofia Mählén, Team Lead para H&M Circular Business Models.

La tienda se ha rediseñado por completo con una distribución más abierta y funcional. Además, incorpora la solución RFID, que permite una gestión más ágil del inventario, así como probadores inteligentes equipados con espejos interactivos que reconocen los productos introducidos en el probador (por ejemplo, artículo, talla y color) con la posibilidad de ofrecer recomendaciones personalizadas sobre productos para así completar el look, así como cajas de autoservicio con lectura RFID. Por otro lado, se incluye también un robot para 'Click & Collect', que permite agilizar el proceso de recogida de pedidos online.

La reapertura de Gran Vía se suma a «las ya realizadas en las tiendas de calle Velázquez, Orense, Castellana y Parquesur, espacios de referencia para la marca en Madrid. O aperturas tan especiales como la del pasado 4 de septiembre, en Le Marais, en Paris. Un nuevo concepto de tienda de 1.000 metros cuadrados e innovador formato boutique en el precioso barrio parisino», apunta Johan Lindelöw, Sales Manager de España, Portugal e Italia.

Para dar la bienvenida a la nueva temporada, Gran Vía 32, se ha vestido con una colección femenina que actualiza el espíritu glamuroso de los 70 fusionándolo con la vena rebelde de los 90. Rombos, cuadros y cuadros escoceses se superponen y se combinan para dar interpretaciones inesperadas del clasicismo. En faldas, prendas de punto y prendas de abrigo, los cuadros se fusionan con rombos, y los mini cuadros se combinan con cuadros más grandes. La paleta es refinada y, a la vez, fresca, con marrones, burdeos y neutros que ofrecen la base para toques deportivos de rojo y azul. El dramatismo se compensa con versiones más grunge del estilo retro, que incluyen vaqueros de pernera ancha y cuero desgastado, tanto real como sintético.

Mientras que para ellos se renuevan los clásicos desde una perspectiva contemporánea. El encanto de la ropa informal, con su estilo relajado y seguro, se hace patente en los vaqueros, las bombers y las sudaderas con capucha, así como en los trajes de corte generoso diseñados para combinar y mezclar. El mix de formas entalladas y oversize resalta la versatilidad general de la colección. La paleta de colores también revisita los clásicos, desde el blanco roto, el azul claro, el camel, el coñac, el marrón, el oliva, el caqui y el negro, realzados por texturas elevadas como tejidos de punto acanalado, denims recubiertos y teñidos, tejidos de lavado suave y tejidos de punto de pelo largo que añaden profundidad y dimensión.