La mejor inversión para el vestidor otoñal que ya triunfó la pasada primavera

De cara a los primeros días del otoño, conviene dar un lavado de cara al armario ya no solo para renovar los looks, sino también para hacer también más ameno el retorno a la oficina. Aunque las tendencias cambien cada vez a un ritmo más rápido, no es necesario invertir demasiado para dotar de un nuevo aire a lo que ya se tiene, tan solo hay que apostar por las prendas y accesorios adecuados. Las expertas en moda apuestan a que la proporción perfecta engloba un 70% de básicos y el 30% restante deben ser opciones de nueva temporada.

A la cuestión sobre qué tipo de prenda elegir, que sea cómoda, favorecedora y fácil de combinar , si se echa un vistazo a las redes sociales hay una prenda muy recurrente que parece haber conquistado a las influencers y que ya la pasada primavera se consagró como una de las favoritas. Se trata del mono denim que ya protagonizó las colecciones de y que apunta a ser de nuevo el gran favorito.

Como ya se sabe, la moda es cíclica y el mono vaquero tuvo su época de auge allá por la década de los setenta , cuando las versiones con cuellos de camisa y perneras acampanadas protagonizaban la mayoría de los looks de 'street style' y que películas como ‘Los ángeles de Charlie’ ensalzaron todavía más. Posteriormente en los noventa volvió , aunque en forma de peto y con unas líneas más sencillas y minimalistas que han contribuido a dar cabida a la versión que en los últimos tiempos se lleva.

De cara al otoño predominan dos patrones, por un lado los diseños ‘baggy’ con pantalones anchos que se ciñen delicadamente a la cintura (como el modelo de la izquierda, de Mango, y por otro, los que rinden homenaje a las versiones retro que Zara se ha encargado de popularizar (el diseño de la derecha).

Los motivos para hacerse con uno son bastantes: además del confort, permite configurar un estilismo potente sin demasiado esfuerzo. Además, puede adquirir uno u otro estilo en función de los accesorios que se añadan, ya sean más formales o sofisticados. Las opciones más populares en redes y que sirven de inspiración.

Uno de los interrogantes que surgen, especialmente con el entretiempo, es con qué combinarlo. Aunque las americanas y gabardinas siempre son un acierto, lucirlo con una cazadora o sobrecamisa vaquera marcará la diferencia, y lejos de resultar excesivo, le dará un toque de tendencia de lo más interesante.

O en su defecto, hombreras, contribuirán a que la figura se vea más estilizada al equilibrar los hombros con la línea de las caderas.

Si se opta por un peto las posibilidades a la hora de conjuntarlo aumentarán notablemente. Camisas con cuellos XXL, jerséis en colores vivos o blusas de satén o encaje harán que se vean más actuales.

En cuanto a los accesorios, los estampados animales y la rafia son dos de las tendencias que más adeptas ganan, y es que con un poco de imaginación todo vale.