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Los cachorros de Hollywood prefieren ser modelos a estrellas del cine

La firma Saint Laurent ha reunido en un desfile a los hijos de algunos veteranos del cine actual

ANGIE CALERO

Los descendientes de la élite hollywoodiense, aquellos chavales que se criaron entre guiones, claquetas y sets de rodaje, ya no quieren seguir los pasos de sus progenitores . No tienen madera de actores o cantantes, les chirría eso de «luces, cámaras, ¡acción!» y prefieren los focos que iluminan las pasarelas de moda a los que alumbran la alfombra roja.

No son otros que Dylan Brosnan (19 años), Patrick Schwarzenegger (22), Charlie Oldman (17) y Dylan Jagger Lee (18), los vástagos de Pierce Brosnan , Arnold Schwarzenegger , Gary Oldman y Pamela Anderson , respectivamente. Recién superada la adolescencia, todos ellos han heredado el atractivo de sus progenitores, que, combinado con la moda transgresora de hoy en día, les confiere un aspecto andrógino y actual , un gancho insuperable para nuevos clientes.

Quizá sea esta la razón por la que la firma Saint Laurent Paris haya dado un papel protagonista a estas promesas de la moda en su último desfile, celebrado en el teatro Palladium de Los Ángeles el pasado miércoles. Hace unos años, la emblemática marca encendió la polémica al permitir que desfilaran chicas menores de edad , con un índice de masa corporal por debajo de la media y con aspecto más de niñas que de mujeres . Ahora, la casa sigue apostando por un tipo de belleza imperfecta .

Estrategia empresarial

Que Hedi Slimane quisiera reducir drásticamente la edad de los clientes de la maison no es baladí. Tampoco que, desde entonces, haya incorporado a los cachorros de Hollywood. El pionero fue Jack Kilmer (20), hijo de Val Kilmer , quien a bordo de la nueva estrategia de Saint Laurent abrió camino al resto . Ellos aportan frescura a la firma, transgresión, cambios... Son carne de photocalls . Y quien arrasa en estos encuentros con la prensa es Patrick Schwarzenegger, sobre todo después de su mediático idilio con Miley Cyrus .

Debido a las carreras tan exitosas de sus padres, todos ellos atesoran miles de seguidores en las redes sociales , lo que les convierte en grandes influencers. Una estrategia de mercado muy poderosa y efectiva para la casa que dirige Slimane: consigue notoriedad, repercusión y el público objetivo que desea , con tan sólo un par de imágenes que los hijos de estos famosos comparten en sus cuentas de Twitter, Instagram o Facebook.

Atrás quedan los años en que Marcus Schenkenberg , Michael Bergin o Mark Vanderloo pisaban fuerte sobre las pasarelas desplegando virilidad. Esa hombría tan característica y que hoy parece que varios directores creativos de las casas más importantes del mundo han decidido que ya no es tendencia. Así sucedió con las súper-modelos de los 80: no ha habido una generación igual que la de Schiffer o Campbell , desde el momento en que Tom Ford puso de moda el llamado heroin chic a través de Kate Moss . A punto de cumplir 50 años, Cindy Crawford deja su legado en manos de su hija Kaia Gerber y los actores más veteranos ven como sus vástagos toman el relevo... para revolucionar la moda.

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