Los Duques de Sussex dejarán de recibir fondos públicos

Así, los Duques de Sussex dejarán de recibir fondos públicos y renunciarán a utilizar sus títulos de Alteza Real. Es decir, que dejarán de percibir la prestación que recibían del Ducado de Cornualles -gestionado por el Príncipe Carlos- y que les ha supuesto hasta ahora el 95% de sus ingresos. Y no solo eso: oficialmente dejan de ser miembros de la Familia Real y además mantendrán su vivienda de Frogmore Cottage como su residencia en Reino Unido, pero tendrán que devolver el dinero que se pagó por su reforma y que costó a los contribuyentes británicos casi tres millones de euros.

Todo esto será efectivo a partir de la próxima primavera, según destaca un comunicado hecho público por el Palacio de Buckingham en el que se afirma que «el Duque y la Duquesa de Sussex están agradecidos con Su Majestad y la Familia Real por su continuo apoyo mientras se embarcan en el próximo capítulo de sus vidas» y «según lo acordado en este nuevo acuerdo, entienden que están obligados a retirarse de los deberes reales, incluidos los nombramientos militares oficiales. Ya no recibirán fondos públicos para los deberes reales ». Sin embargo, el acuerdo sí contempla que «con la bendición de la Reina, continuarán manteniendo sus patrocinios y asociaciones privadas». Aunque ya no podrán representar a la Reina, los Sussex han dejado claro que todo lo que hagan «continuará manteniendo los valores de Su Majestad». Esto de alguna manera puede ser interpretado como una advertencia, sobre todo ante los rumores de que pudieran conceder alguna exclusiva o revelar información que pudiera ocasionar problemas a la Monarquía británica.

Al dejar de ser miembros activos de la Familia Real, perderán los títulos de Alteza Real. Aunque esta cláusula del comunicado suscitó dudas sobre si podrán seguir utilizando el título de Duques de Sussex, el corresponsal de la BBC en Buckingham, Peter Hunt, explicó que Harry y Meghan «no han sido despojados de este título», pero que «ellos mismos han renunciado a utilizarlo» . Esto previsiblemente afectaría a la comercialización de productos bajo esa marca. Harry también perderá todos sus títulos militares honorarios y dejará de ser capitán general de los Royal Marines, título que heredó de su abuelo, el Duque de Edimburgo, después de retirarse, según informó el corresponsal de «ITV» en la Casa Real británica, Chris Ship. Este experto en temas reales también cree que el Príncipe Carlos podrá seguir ayudando económicamente a su hijo de forma privada a través del Ducado de Cornualles.

Desde hace algunos días, los expertos en protocolo real especulaban con que esto sucedería, tal como fue el caso de Diana de Gales, que mantuvo el título de Princesa tras su separación del Príncipe Carlos, pero no el tratamiento de Alteza Real. Una decisión que dependió exclusivamente de la Reina.

Lo que no queda claro es si podrán conservar la marca comercial «Sussex Royal» , cuyos trámites de registro iniciaron la semana pasada y si participarán en algún acto institucional con el resto de los Windsor.

En la bomba informativa que lanzaron el 8 de enero, el matrimonio manifestó su intención de vivir entre Norteamérica y el Reino Unido. Una noticia que fue bautizada como el «Megxit» y que le ha quitado protagonismo al propio Brexit. El diario inglés «The Sun» reveló ayer en una exclusiva que Meghan se ha mostrado interesada en una mansión de casi 25 millones de euros localizada en Vancouver.

El comunicado de ayer también detalla que no se hará ninguna declaración oficial sobre el tema de la seguridad de la familia, ya que «existen procesos independientes bien establecidos para determinar la necesidad de seguridad financiada con fondos públicos».

Antes del comunicado emitido ayer por el Palacio de Buckinham, la Reina hizo público el acuerdo al que ha llegado con el Príncipe Harry. En él Isabel II continúa con la línea suave y conciliadora de los comunicados anteriores. Eso sí, con una diferencia y es que se refiere al matrimonio por sus nombres de pila y no por sus títulos. «Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros muy queridos de mi familia». Además, empezó diciendo que «después de muchos meses de conversaciones y discusiones más recientes, me complace que juntos hayamos encontrado un camino constructivo y de apoyo para mi nieto y su familia ». En un claro intento de apaciguar las aguas que los medios de comunicación y las redes sociales se han encargado de remover, la Reina concluyó su comunicado mostrando que «es la esperanza de toda mi familia que el acuerdo de hoy les permita comenzar a construir una nueva vida feliz y pacífica».

Punto y aparte se merecen las palabras que le dedica a Meghan: «Quiero agradecerles por todo su trabajo dedicado a este país, la Commonwealth y más allá, y estoy particularmente orgulloso de cómo Meghan se ha convertido tan rápidamente en un miembro de la familia».