Moncloa da por superado el trance: «Les pudo la ansiedad del minuto de oro»

«Les pudo la ansiedad del minuto de oro», critican. A Sánchez le habían recetado «mucha calma» en su entorno y la lluvia de preguntas, casi por desborde, del PP fue la mejor vía de escape para no responder a nada. «Ha sido todo una falta de respeto, le cortaban constantemente, le hacían fotos», se quejaba un alto cargo a este diario, como si esta estrategia no hubiera sido la mejor coartada.

«Otro exitazo de Feijóo», terciaba un miembro del Gabinete, cuestionando que el gran as en la manga de citar al presidente del Gobierno, tanto tiempo reservado, se hubiera dilapidado sin lograr arrancarle más dato esclarecedor que sus inconcreciones o «no me consta». «¿Esa era la gran bomba? Algo que no tiene cabida en el reglamento?», se preguntaban desde la comitiva de Sánchez, ante el guante que le lanzó el senador Miranda al presidente de someterse a un careo con Víctor de Aldama y José Luis Ábalos en otra sesión de la misma comisión. «Un conejo que se han sacado de la chistera», resume otro dirigente.

El saldo para Moncloa es positivo dado Sánchez no sale peor de lo que entró al Senado, aunque tampoco mejor, porque las citadas inconcreciones le impidieron trasladar la sensación de solvencia que en su equipo se habían propuesto proyectar. En el Ejecutivo consideran que en este tipo de situaciones, es preferible mantener el marcador a cero que arriesgarse para tratar de marcar(se) un gol.

«El presidente ha superado la prueba. Se ha explicado, porque no había nada que esconder», aseguran en su entorno, tirando de argumentario, pero Sánchez dejó ayer toda una hemeroteca de declaraciones cuyo valor se irán ponderando en función del avance de las investigaciones judiciales que cercan al PSOE y a su entorno.