Los Miami: 140 millones lavados de 7,5 toneladas de coca y 92 acusados

Así comienza la serie 'El inmortal', una versión libérrima de la historia de Los Miami, la organización criminal que manejó los hilos de la droga y, en general, de la cara más oscura de la noche madrileña. La escena antes referida no fue así. Juan Carlos Peña Enano, el primer líder de la banda, fue acribillado (eso sí, no murió), mientras esperaba en su Porsche Panamera el cambio de semáforo en la zona de Pío XII (Chamartín). Quien sí recibió una ráfaga de un subfusil fue uno de sus hombres de confianza ante su hijo y al dejarlo en clase, fue el colombiano José Ricardo Rojas Montes, alias Richi. Los sicarios iban en moto y el capo acababa de dejar a su hijo en la puerta del British Council School, en Pozuelo de Alarcón. Era marzo de 2018. Residía en La Finca, la urbanización más exclusiva de Europa. Un crimen sin esclarecer.

La segunda generación de los Miami se sentará en el banquillo desde el 23 de marzo, en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, reservada para macrojuicios: serán cerca de un centenar de procesados, con sus correspondientes abogados defensores; un calendario de maratón y una lista de delitos de una extrema gravedad.

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La actualidad del caso viene de la mano, por un lado, de esta vista oral, tras doce años de las detenciones principales, en 2011. Y de la mezcla de realidades para dramatizar una ficción que, además de blanquear a Peña Enano (José Antonio, en la serie, rodada en sus inicios en el crimen en Pueblo Nuevo, Ciudad Lineal, aunque realmente se crió en Moratalaz ) y sus pares, arroja una serie de 'casualidades': el actor que interpreta al Cojo o el Inválido (como también se conoce Peña, detenido por última vez en 2015 en un cultivo de marihuana en Palencia), el canario Álex García (y su pareja, Verónica Echegui), está investigado en la operación Jenner desde este enero, al tratarse, presuntamente, de una de las 2.200 personas que acudió a una mafia del mundo de la noche para obtener el certificado de las tres vacunas del Covid previo pago y sin inoculárselas. Comparte imputación en esa causa, precisamente, con Ana María Cameno, alias 'Pollito', 'la Rubia' o, como es mucho más conocida, 'la Reina de la Coca'. La de verdad. La que es una de las principales patas de este sindicato del crimen, probablemente el mayor conocido en España. La serie fue rodada entre mayo y septiembre de 2021, y el falso registro en la red de vacunados data de diciembre.

Cameno y los 'herederos' de Peña Enano, los hermanos Álvaro y Artemio López Tardón, son algunos de los personajes que aparecen desdibujados en la serie. Estos dos son los líderes de la, según el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, «complejísima y estructurada organización delictiva» transnacional que eran los Miami. La Fiscalía pide 45 años de cárcel para los hermanos. Hasta 92 personas, más de una década después de su desarticulación, en 2011, se sentarán en el banquillo a partir del próximo 23 de marzo. Las dilaciones han sido múltiples y podrían servirles de atenuantes si se confirman que son indebidas, algo que se dirimirá en las cuestiones previas, al inicio del juicio; se trata de un sumario, el de la operación Colapso-Edén (en realidad, dos investigaciones que convergieron), de casi 190.000 páginas.

Los verdaderos protagonistas

Álvaro López Tardón

De 48 años, cumple condena de 150 años de prisión por blanqueo en Florida, EE.UU. Es el máximo responsable de la organización.

Artemio López Tardón

Hermano mayor de Álvaro (50 años), sí podrá ser juzgado por blanqueo en España, además de por tráfico de drogas y numerosos delitos más.

Ana María Cameno

La Reina de la Coca, Pollito, la Rubia o la Llorona. Burgalesa de 1970, aficionada a la santería, es la mayor experta en labores de logística.

Rafi Beyham

Ivo el Búlgaro (1976) se desgajó de Lauro durante la investigación de este caso y se le acusa de traficar con anabolizantes y blanqueo de capitales.

Una de las causas de este retraso continuado es la cerrazón de las autoridades de Estados Unidos para extraditar al líder máximo, Álvaro, condenado a prisión en Florida a 150 años de cárcel por blanquear 140 millones de euros. Parece que al final sí será juzgado por las autoridades españolas, aunque no ha trascendido si lo hará de manera presencial o por videoconferencia desde prisión. Eso sí, la condena que cumple en Norteamérica le 'libra' de ser juzgado por lo mismo en España, así que aquí se dirimirá, sobre todo, su papel en la gigantesca organización criminal de narcotráfico a nivel internacional y delitos contra la Hacienda Pública (fraude de 8,5 millones), entre otros. Su hermano Artemio, actualmente en libertad a la espera de juicio, sí tendrá que hacer frente a las acusaciones de lavado de capitales.

El auto de procesamiento señala que deben sentarse en el banquillo 92 personas (aunque algunas están en paradero desconocido) de este enjambre faraónico de tráfico de drogas, blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas, falsedad documental y de moneda y un luengo etcétera de presuntos delitos.

La rama principal es la del lavado de dinero, para la que, supuestamente, los López Tardón utilizaron una red de alrededor 20 testaferros (incluidos su madre, su hermana y su cuñado), entre, al menos, 2005 y 2011, aunque existen apuntes de 1998. La tupida telaraña va desde España a EE.UU., y pasa también por Colombia y Perú, además de contar con hombres de paja y empresas 'aliadas' de origen indio. En este capítulo, en el que se incluyen tráfico de cocaína, hachís, marihuana y anabolizantes, se lavaba el dinero a través de al menos ocho mercantiles controladas por los López Tardón y satélites en España, además de otras nueve en EE.UU. Sus objetos sociales eran de lo más variopinto: desde la fabricación de buques a la hostelería, pasando por agencias de publicidad, inmobiliarias, compra-venta de vehículos (la red manejaba al menos una treintena de coches de lujo, incluidos Lamborghini de distintos modelos, Hummer, Ferrari..., que no eran más que otra forma de blanqueo) y hasta una empresa de animadores socioculturales. Aparecen en el sumario 13 viviendas en Miami y Miami Beach, una de ellas donde residía Álvaro con su entonces pareja, Sharon Cohen, a la que maltrataba y cuya confesión ha sido fundamental para engrilletarlo.

La Audiencia Nacional enfatiza el siguiente dato, tan ilustrativo. Entre 2001 y 2008, Álvaro declaró a la Agencia Tributaria solo 83.928 euros, pero gastó como mínimo en el mismo periodo 872.325, aparte de 1,2 millones recibidos en transferencias. Se llegaba a gastar 1.800 euros en una noche de fiesta o que un día compró, al 50% con su madre, un chalé en Villaviciosa de Odón (1.700 metros cuadrados de parcela y 700 de vivienda) por 700.000 euros. Y que escondía en zulos de su casa de La Piovera 24 millones de euros.

En cuanto a la Reina de la Coca, por otro juicio de marzo pasado también por narcotráfico, cumple condena de 16 años de prisión. Ha apelado su libertad hasta que la sentencia sea firme, pero el juzgado se lo acaba de denegar, según ha podido saber ABC. Esta burgalesa, su exmarido, su cuñado y algunas otras personas más conformaban la segunda rama de la trama de los Miami, que se centraba sobre todo en la parte logística: la distribución y entrada de la droga (7,5 toneladas en tres envíos, anuales, desde Perú a España, son las que se han podido probar para el juicio); y el montaje del mayor laboratorio de cocaína a nivel continental, en Villanueva de Perales (Madrid), que fue desmantelado por la Policía Nacional en enero de 2011, teniendo que actuar el GEO.

En esa época, la señalada como líder de la segunda rama se relacionaba con Laurentino Sánchez Serrano (jefe de la cuarta pata, según la Audiencia Nacional), alias 'Lauro', ciudadano colombiano-español que movía presuntamente la mercancía por locales de ocio que estaban a sus órdenes y, sobre todo, al lavado de dinero, a través de empresas y testaferros como su pareja, Fanny Fernández Bosch, y el hermano de Lauro, Ángel Sánchez Serrano, apodado 'Serio'.

Llegamos en ese punto a la trama del ocio nocturno madrileño, con el nombre de Raúl Juárez-Smith como presunto responsable de la tercera rama. El prolijo escrito judicial, de 619 páginas, relata también la alianza de los López Tardón con Rafi Beyham Remzi, alias 'Ivo el Búlgaro'. El asesinato de uno de sus lugartenientes en la discoteca Palace, en Ópera, en enero de 2009, fue la espita que desencadenó la investigación de la trama referida al mundo de la noche, los movimientos de la droga de los Miami en los clubes de Madrid y la mafia de los porteros de discoteca que presuntamente controlaba y que se apodaron los Rompecostillas.

En este caso, a Ivo se le juzga por tráfico de drogas y por blanqueo. El escrito explica cómo, a lo largo de esta investigación de más de dos años, la relación entre el búlgaro y Lauro se fue deteriorando, hasta el punto de que el primero (que siempre se ha definido como un mero «empresario de seguridad privada») se dedicó a su propio negocio, siempre el juzgado: «La distribución al por menor de sustancias anabolizantes y productos dopantes a los que se refiere en clave como 'los bombones', 'los pantalones' y 'las proteínas'».

Entre las prácticas habituales de Ivo el Búlgaro estaba la presión a periodistas, a los que solicitaba que le entrevistaran y, en caso contrario, denunciaba y llevaba a juicio. También aparece en escuchas telefónicas con algunos miembros de policías locales de la región en las que se preparaban ajustes de cuentas o venganzas hacia reporteros pero también a testigos de otros casos vinculados a la corrupción policial y al mundo de la noche. Sin embargo, estas últimas causas fueron desechadas judicialmente.