La víctima menos grave del tiroteo afirma ahora que no recuerda nada

En cuanto al otro varón, de 25 años, con dos disparos, sí está consciente y estable, pero se niega a ayudar en la investigación. Ha declarado a los agentes de Policía Judicial que no se acuerda de nada.Algo que no se creen los uniformados.

El suceso se produjo a primera hora de la tarde, muy cerca de la sede de la Policía Local. Las víctimas salían de un portal cuando los pistoleros, en una moto que aparentemente no era de gran cilindrada, se pararon frente a ellos. «Estamos convencidos de que se conocían. Iban a darles caza. Conocían sus rutinas de movimiento, aunque los heridos no son de Ciempozuelos, parece ser», explican fuentes del caso.

Primero se produjo una discusión, con zarandeo y cuchillada de por medio. Los atacantes, en ningún momento, se quitaron los cascos. Eso sí, algunos testigos aseguraron que, cuando estaban gritando, al menos uno de ellos hablaba un español con acento latinoamericano.

La refriega inicial duró alrededor de medio minuto. Entonces, el que iba de 'paquete' en la moto sacó una pistola de pequeño calibre y descerrajó los seis tiros a sus rivales, aunque posteriormente se recogieron una decena de casquillos de la escena.

El de 25 años, malherido, echó a correr hacia la Calle Mayor, donde fue auxiliado. Trabajadoras del servicio de estacionamiento regulado y la propia Policía Local fueron las primeras en socorrerlos.

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Los sicarios huyeron rápidamente. La Guardia Civil está visionando las cámaras de bancos y comercios cercanos (las de la Policía no graban las aceras) y también las de Tráfico de la autovía A-4 (Andalucía), la más cercana y la única que cuenta en esa zona con videovigilancia. Tratan así de reconstruir no solo la ruta de entrada de los homicidas, sino, sobre todo, por dónde huyeron.

Sobre los heridos, que no llevaban droga encima en el momento del ataque, se sospecha que se vieron envueltos en algún tipo de ajuste de cuentas, aunque sin tener claro aún de qué tipo. Los equipos de Policía Judicial de Valdemoro y de Pinto, inicialmente, son los que llevan el caso. Instruye un juzgado de Ciempozuelos, que ha decretado el secreto de sumario.

Vecinos de la zona apuntaban esa misma tarde a que el ataque estaba preparado. «Fue todo muy rápido, pero sabían a lo que venían», coincidían, sin que ninguno conociera a los tiroteados.