Tres jóvenes se enfrentan a una multa de hasta 30.000 euros por simular un atraco para gastar una broma a sus amigos

El denunciante explicó a los agentes que había tenido conocimiento de lo sucedido a través de un mensaje de texto que su hijo le había enviado a su hermana. Tras ser localizado por una patrulla desplazada al lugar de los hechos, el joven no tardó en reconocer que se trataba de una falsa alarma y que todo formaba parte de una «broma entre amigos».

El suceso se ha saldado con las heridas de varias personas en sus cuerpos. Una segunda patrulla, que peinaba las inmediaciones localizó poco después a otro joven tendido en el suelo y con las piernas ensangrentadas. Una vez repuesto de las heridas, fue él quien relató a los agentes lo que había sucedido.

Los tres supuestos asaltantes habían irrumpido encapuchados en la zona aislada en la que se encontraba todo el grupo para atemorizar al resto de jóvenes. Auxiliados con linternas de los efectivos de la Policía Local, los adolescentes que habían escapado relataron los hechos.

Los servicios sanitarios fueron requeridos para atender en el lugar a algunos de los jóvenes lesionados, a quienes se les informó de su derecho a presentar denuncia por lo ocurrido.

Los agentes, por su parte, procedieron a levantar acta sobre un suceso que podría constituir, para los tres organizadores de la broma, una infracción grave de la Ley de protección de seguridad ciudadana castigada con una sanción de entre 601 y 30.000 euros de multa.