Feijóo y Moreno alientan el vuelco en Sevilla como una estocada clave sobre el PSOE

Para el PSOE el gobierno de Sevilla es un símbolo, y mantenerlo uno de los principales objetivos del 28 de mayo. Algo de lo que ha advertido Feijóo, que ha pedido que hay que «darle un gran disgusto ganando en Sevilla y las capitales andaluzas». La idea de que el voto a Moreno fue excepcional y no se repetirá es algo que el PP necesita combatir.

Durante la precampaña Moreno hizo actos en varias ciudades de España ya que ahora es un activo nacional del partido. Pero en esta campaña se está volcando en hacer campaña en Andalucía con ese mensaje: «De nada va a servir ser la segunda comunidad con la presión fiscal más baja o que yo quite trabas administrativas si luego el Ayuntamiento de Sevilla los sube. A todos los sevillanos y andaluces que optaron por la papeleta del PP les digo que si quieren seguir con este cambio necesitamos el cambio en muchos ayuntamientos de Andalucía», ha dicho Moreno.

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El presidente andaluz ha transmitido que la votación no debe servir para «avalar los desvaríos de ese gobierno de coalición, con radicales, independentistas y con batasunos». Y ha advertido que «coger la papeleta de cualquier candidato del PSOE es darle un balón de oxígeno a Sánchez». Moreno ha explotado la idea, cómo luego haría Feijóo, de que Sánchez ha cambiado al PSOE y que ese partido histórico ya no existe. Dejando huérfanos a muchos votantes, a los que ahora el PP aspira a atraer: «A esos votantes del PSOE que se van a quedar en casa. Les pido un paso más. Tienen un instrumento fundamental coger la papeleta del Partido Popular».

Ese mensaje es tan nuclear que, por primera vez en esta campaña, las candidaturas de Bildu no han sido elemento central del discurso de Feijóo. El presidente del PP ha tirado de cancionero infantil para ir recitando «las mentiras» de Sánchez y ahí sí ha incluido el pacto con Bildu o su antiguo compromiso de no gobernar con Podemos. «Ya que nos va a contar mentiras, hay que cantarle y decirle: tralará. Tralará a no gobernaré con Podemos; no cederé al independentismo, tralará; con Bildu no vamos a pactar, tralará; no habrá rebaja por la ley del solo sí es sí, tralará; no habrá indultos a independentistas, tralará; mantendremos el delito de sedición, tralará; incrementaremos las penas de corrupción y tipificaremos el de referéndum ilegal, tralará…», ha recitado Feijóo seguido por las 2.000 personas del Auditorio Cartuja Center de Sevilla.

Feijóo se ha comprometido a «desbloquear» las principales infraestructuras que tiene Sevilla pendiente cuando llegue al Gobierno junto a Juanma Moreno y con José Luis Sanz como alcalde de Sevilla. El presidente del PP se ha referido a «una España cansada de Sánchez», que «ha convertido un partido de Estado a un partido que apoyan los que no creen en el Estado». En Andalucía es donde el PP entiende que puede funcionar mejor la apelación a los socialistas desencantados, por eso en su búsqueda se parte del reconocimiento de que el PSOE fue «un partido de Estado» pero que Sánchez «ha liquidado» ese PSOE.