El triple desahucio del Gobierno a agricultores para dar luz a la desaladora de Torrevieja: sin agua, sin tierra y con casas devaluadas
Regantes de San Miguel de Salinas denuncian el impacto visual de tantas placas solares junto a sus viviendas ya sin vistas al parque natural de las Laguna de La Mata
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El futuro que aguarda a un grupo de agricultores de una de las zonas más fértiles de la Vega Baja del Segura, en San Miguel de Salinas (Alicante) encaja en dos de las tres acepciones de la palabra «desahuciar», según la RAE: «Quitar ... a alguien toda esperanza de conseguir lo que desea», y también «despedir al inquilino o arrendatario mediante una acción legal». Pues el Gobierno los va a dejar sin agua, sin tierras y con sus casas devaluadas.
¿Cómo es posible este triple desahucio? Por el proyecto de una planta fotovoltaica de grandes dimensiones con la que dar energía a la mayor desalinizadora de Europa, la de Torrevieja, para así aumentar su capacidad y cerrar el grifo todo lo posible a los trasvases del Tajo-Segura. Dispondrán de menos agua y mucho más cara -además inservible si no se mezcla con otros caudales, por su composición química-, se quedarán sin tierras por las expropiaciones necesarias para instalar las placas solares, que además arruinarán el valor de sus viviendas al perder las vistas privilegiadas de que gozan ahora al parque natural de Las Lagunas de la Mata.
«Una de las quejas es por la orientación de las placas al sur», corrobora Víctor Sáez, uno de los afectados, ya que con esa ubicación enfocadas «a parte de las viviendas del alrededor de las lagunas», estas propiedades difícilmente podrán ser vendidas porque no tendrán el mismo atractivo que en la actualidad.
De hecho, este aspecto estuvo en boca de agricultores y vecinos durante la protesta que han protagonizado esta semana en Alicante ante la Subdelegación del Gobierno, para presionar y que no se lleva a cabo este proyecto sobre una extensión de 200 hectáreas de terreno.
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Otros perjuicios en la zona serán, tal como pone de relieve Sáez «el calentamiento del entorno por la acumulación de placas solares y la cercanía del pueblo y de las urbanizaciones, aparte del daño agrícola y al turismo».
En su caso personal, han vivido de su producción de cítricos cuatro familias durante más de tres décadas, según relató a ABC.
No obstante, si no hay un cambio sustancial de planes por parte del Ministerio de Transición Ecológico y Reto Demográfico, la implantación de cientos de paneles fotovoltaicos transformará el paisaje en San Miguel de Salinas. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó en febrero las instalaciones de la planta desalinizadora de Torrevieja y parece fiar por completo el futuro agrario en esta zona, que forma parte de la llamada 'huerta de Europa', a esa ampliación de este recurso hídrico en detrimento de los trasvases.
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