Mazón articula un frente con Andalucía y Murcia para la reforma de la financiación autonómica

En la tradicional entrevista que la Cadena Ser realiza cada día de Navidad al presidente del Ejecutivo autonómico -por primera vez con Mazón tras ocho años de Ximo Puig-, el líder 'popular' ha insistido en la necesidad de convocar una conferencia de presidentes regionales urgente para abordar la reforma de la financiación.

Mazón ha asegurado que en lugar de mantener un encuentro bilateral con los presidentes de Murcia y Andalucía, va a convocar a ambos a una reunión a tres bandas para abordar los asuntos comunes a los tres territorios. Una reunión que, dice, «es prioritaria respecto a otras reuniones» y que pretende celebrar en el primer trimestre de 2024. Después, tomará contacto con el presidente de Aragón para hablar de temas logísticos y con la presidenta balear por temas turísticos, según ha confirmado.

Sin embargo, el jefe del Consell no tiene previsto reunirse con el presidente catalán Pere Aragonés porque «tiene poco en común con él». De hecho, le ha reprochado que en su primera visita a la Comunidad tras el 28M no hubiese tenido la deferencia de comunicar que venía a Valencia a entregar los Premis Octubre. «Sí quiero estrechar lazos con el pueblo catalán, los principales clientes de la Comunidad, pero no con su presidente», ha señalado.

Al igual que han hechos otros presidentes autonómicos, Mazón ha confirmado que le pedirá a Pedro Sánchez la convocatoria de una conferencia de presidentes autonómicos para hablar de financiación. También tiene previsto reunirse en breve con la Delegada del Gobierno Pilar Bernabé para abordar este y otros asuntos.

Sobre otros temas de actualidad, se ha mostrado optimista de cara a llegar acuerdos con el PSOE y ha puesto como ejemplo la ampliación del puerto de Valencia. Eso sí, ha puntualizado que «será firme» a la hora de acabar con el problema de infrafinanciación y el del endeudamiento. «La deuda que ahora tiene la Comunidad la llevamos pagándola los valencianos por adelantado demasiado tiempo», ha criticado.

En paralelo, Mazón se ha mostrado crítico con el Gobierno por no facilitar, «a pesar de pedirlos durante meses», los datos de las transferencias del Estado en 2024 y que genera en el presupuesto de la Generalitat del año que viene un desfase de 263 millones de euros en el capítulo de ingresos.

Así las cosas, ha negado haber presupuestado al alza y «estar haciéndole un pulso al Gobierno» al fijar en las cuentas del Consell un déficit público del 0'3% cuando Hacienda prevé para las autonomías un 0'1. Al respecto, ha sostenido que a Murcia y a la Comunidad Valenciana se les debería permitir este déficit diferenciado por ser las peor financiadas.

En cualquier caso, tanto en las transferencias del Estado como en el déficit, el presidente autonómico espera que en las reuniones técnicas entre Ministerio y Conselleria de Hacienda se acuerden los correspondientes ajustes.

Sobre las cuentas autonómicas, ha presumido de haber sacado adelante los presupuestos en tiempo y forma «a diferencia de lo que le ocurrió al Botànic». Tanbién ha admitido que le gustaría que en esta legislatura los grupos de la oposición apoyasen sus cuentas, «aunque fuera con una abstención», como le ocurrió siendo él presidente de la Diputación de Alicante.

Mazón también ha apelado durante su entrevista navideña en la SER al PSPV-PSOE y Compromís a llegar a grandes acuerdos, aunque ha reprochado a los primeros que no le hayan hecho llegar por escrito un documento extenso con los pactos que promueven y a los segundos que ni siquiera acudieran al Palau cuando fueron citados para hablar de ello.

En ese sentido, ha confirmado que esperará a que los socialistas terminen su proceso interno de renovación para acometer la negociación de la renovación de instituciones estatutarias como el Consell Jurídic Consultiu, la Sindicatura de Comptes o el Consell Valencià de Cultura. Al respecto, espera negociar con una dirección socialista «que tenga la mayor representatividad posible». Sobre el rumbo del PSOE, según Mazón, «es bueno que haya estabilidad en los partidos políticos y que haya una socialdemocracia razonable con la que poder hablar».

En cuanto a las voces dentro de su partido que atribuyeron el resultado obtenido por Alberto Núñez Feijóo en las elecciones generales de julio al pacto express que Mazón cerró con Vox para gobernar, al presidente de los populares valencianos «no le consta que en Génova se piense esto» y lo atribuye a «juegos políticos».

Ha asegurado que si Feijóo no consiguió mayoría suficiente para gobernar fue por «circunstancias varias» y que en todo caso el PP valenciano contribuyó a la victoria electoral de los populares ya que se mejoraron los resultados obtenidos en las elecciones autonómicas de mayo.

Respecto a las polémicas protagonizadas por Vox, como la de llamar al PSOE partido golpista, pedir que se saquen libros de diversidad y sexualidad de la sección de infantil de las bibliotecas, o la de relacionar a la población magrebí con violaciones grupales, Mazón ha señalado que «ninguna de estas afirmaciones le han producido dolor de cabeza». «Los dolores de cabeza me los dan asuntos como las facturas sin informar, los contratos a dedo, o las trampas administrativas que, dice, se encontró al llegar», ha insistido.

Así, ha puesto como ejemplo que la dependencia de 25.000 familias estuviese sin cobertura presupuestaria o el bono térmico de 100.000 personas que llevaba dos años sin pagarse. Según Mazón «los de Vox son dueños de sus palabras y en su gobierno hay una única voz».

Por último, Mazón ha reconocido que le gustaría captar el voto de otros espectros políticos, como ya hizo con Ciudadanos para que se sumen a un proyecto a su juicio, de «centralidad, transversalidad, y de poner la gestión eficiente frente a la ideología o el sectarismo».

En ese sentido no baraja un posible adelanto electoral durante esta legislatura que le pudiese dar en solitario una mayoría absoluta. Asegura «que es una cosa en la que no ha tenido tiempo de pensar», como también si se presentará o no a la reelección.