Trapero, sobre el caso 'Macedonia': «El juez iba a por la implicación de los guardias civiles»

Así lo ha certificado este miércoles Josep Lluís Trapero, durante el juicio que se celebra en la Audiencia de Barcelona . El mayor, entonces al frente de la División de Investigación Criminal (DIC), ha relatado que las pesquisas no convencieron a Aguirre, que también llegó a investigar a la Unidad Anticorrupción de los Mossos por no haber transcrito algunas de las conversaciones intervenidas entre los investigados.

Este fue el motivo «formal», según Trapero, que llevó al instructor a poner la lupa sobre la policía catalana, aunque el mayor ha detallado como días antes se había quebrado la relación con Aguirre. « El juez iba a por la implicación de los guardias civiles, y me planteó que le pidiésemos la intervención telefónica de todos los miembros del grupo ECO, creo que eran 16 . Uno puede entender, y a veces pasa, que haya un policía corrupto, pero 16 y que todos tengan que ver con la misma operación era poco creíble, pero él continuó insistiendo, y me dejó claro que quería que se la pidiese yo», ha indicado ante la Sala.

Trapero se negó y trasladó al instructor que solo lo haría si éste lo ordenaba por escrito. «Miró hacia el techo y ahí se acabó la reunión», ha detallado sobre el encuentro. Tras ello, el juez les ordenó que abandonasen las pesquisas y las derivó a Asuntos Internos, tanto de la policía catalana como del Instituto Armado.

Finalmente, entre los 17 imputados en el caso 'Macedonia' solo hay un uniformado, un subinspector de los Mossos, del que varios agentes y mandos -también Trapero- han corroborado que sus contactos con confidentes les valieron para obtener información sobre posibles autores de homicidios y robos en la comarca del Garraf.

Es decir, dichos testimonios tumbarían así la acusación de la Fiscalía contra Josep R., y vendrían a reforzar la tesis de su defensa, que esgrime que las conversaciones intervenidas entre el mando y algunos de los investigados en esta causa obedecían a una labor policial, de la que este, además, daba cuenta a sus superiores.

Entre esos confidentes está Manuel Gutiérrez Carbajo, colaborador tanto de los Mossos, como de la Guardia Civil y la Policía Nacional, y que fue un testigo clave en la investigación contra la trama corrupta en relación a los prostíbulos Riviera y Saratoga (Castelldefels) por el que acabaron condenados varios mandos del CNP.

El letrado de Carbajo, Samuel Pérez, también ha preguntado al mayor sobre una conversación en la que el excomisario José Manuel Villarejo y el jefe de la UDEF José Luis Olivera «conspiran» para construir una causa judicial contra Carbajo, el propio Trapero y el fiscal Anticorrupción David Madero, de la que informó ABC.

«Desconocía que Villarejo tenía algún papel, pero respecto del resto de personas que conversan ahí, son coherentes con los movimientos que estábamos detectando desde 2009. Es como actúa la corrupción. Busca desacreditar al fiscal investigador, a unos policías y a un testigo colaborador», ha señalado el interpelado.