Junts rompe la coalición con ERC: «El de Aragonès es un gobierno fracasado y sin legitimidad»

El pulso entre los partidarios de romper y los favorables a seguir, se ha decantado hacia los primeros. La presidenta del partido, Laura Borràs, al frente de los rupturistas y de la mano de Carles Puigdemont, gana su batalla interna contra el secretario general, Jordi Turull, quien renunció a posicionarse públicamente en esta consulta, a pesar de anunciar que lo haría, y que no ha logrado, esta vez, demostrar que, en parte, controla el partido, como así ha hecho en las votaciones anteriores para elegir a los cargos intermedios de la formación creada en 2017.

Con una alta participación, el 79,18% de los 6.465 militantes con derecho a voto, los afiliados han optado mayoritariamente por responder «no» a la pregunta: «¿Quieres que Junts siga formando parte del Govern de Cataluña?». Un 55,73%, frente al 42,39% de los militantes que se han decidido por el «sí» en la pregunta planteada por la dirección de Junts. Un 1,88% de los que han votado lo han hecho «en blanco». Así, la formación que preside Borràs queda partido por la mitad en una cuestión tan trascendental como la de romper el Govern catalán.

A lo largo de las últimas 48 horas (se podía votar entre el jueves y el viernes), los dirigentes del partido, han reconocido que no se puede descartar una escisión por parte de los que perdieran la consulta. Una opinión que la semana pasada no se reconocía en público y que a medida que se acercaba la votación sonaba con fuerza. 'A priori', parecía más factible la escisión si perdía la opción de romper con ERC. Sin embargo, los rupturistas han vencido. En cualquier caso, Junts entra, ahora, en un terreno desconocido.

Minutos antes de dar a conocer oficialmente el resultado de la consulta, a través de un breve comunicado, Turull ha hablado con Aragonès para informarle del resultado, según han confirmado a ABC fuentes de la presidencia autonómica. Seguidamente, Aragonès se ha reunido en el Palau de la Generalitat con su equipo de colaboradores más cercano para estudiar el próximo paso que dará, que pasa irremediablemente por una remodelación del Govern, ya que los seis consejeros de Junts dejará el ejecutivo.

Tras conocerse el resultado, Junts ha celebrado una ejecutiva extraordinaria, en la que se ha analizado el resultado y los próximos pasos de la formación, amenazada ahora por el riesgo de escisión. A media tarde, han comparecido ante la prensa Turull y Borràs para dar cuenta de lo acordado en la reunión, cuya primera consecuencia es que los seis consejeros de Junts en el Govern han presentado su renuncia ante el presidente autonómico, según ha dicho Turull.

Por su parte, Borràs, que se ha presentado con un rostro de satisfacción en comparación con el de Turull, ha señalado que «Junts ha hablado y ha decidido salir del Govern», argumentando que esta decisión se debe a que, desde su punto de vista, «no se estaba cumpliendo el acuerdo que firmamos con ERC y esto quiere decir que no se estaba cumpliendo el mandato de las urnas del 14-F». Sobre todo, en «el eje nacional», ha recordado. Desde Junts se acusa a ERC de no dar pasos a favor de la secesión.

La presidenta de Junts, que ha votado salir en la consulta, ha dicho que, con esta consulta, «Junts gana y Pere Aragonès pierde». Y ha añadido: «Constatamos que el gobierno de Aragonès es un gobierno fracasado y sin legitimidad, que prefiere pactos con el PSOE. Ninguna de sus apuestas ha dado rédito. Nuestra salida (del Govern) es un acto de coherencia y responsabilidad. Nuestra militancia ha dicho que no quiere estar en un gobierno que no avance hacia la independencia».

Sobre una posible ruptura de Junts y la gestión del resultado que hará la dirección, a partir de ahora, Borràs ha asegurado que «todos los votos expresados son votos que la dirección tiene en cuenta» y ha dicho que «la consulta demuestra que somos un partido plural». En esta línea, Turull ha añadido que «asumimos la decisión (de la consulta) con todas las consecuencias» y «asumimos el resultado, porque defendemos la radicalidad democrática».

Está previsto, también, que desde el Palau de la Generalitat, Aragonès comparezca ante la prensa para valorar la situación, ya que a partir de ahora el Govern tendrá solo el apoyo de 33 de los 135 diputados autonómicos. Un gobierno en minoría y sin posibilidad, prácticamente, de aprobar leyes e iniciativas parlamentarias.

Al poco de conocer el resultado de la consulta, más allá de algunos dirigentes de Junts que votaron por romper como Jaume Alonso Cuevillas y Joan Canadell, entre otros, que lo han celebrado, se han visto, en Twitter, las primeras reacciones de Jéssica Albiach y Alejandro Fernández, líderes de los comunes y el PP en el Parlamento de Cataluña. Albiach, en la que se centran algunas miradas como posible socio de ERC, a partir de ahora ha lamentado el resultado y ha admitido que «a partir de ahora se abre una nueva oportunidad de poner Cataluña en marcha con una mayoría progresista».

Por su parte, el presidente del PP catalán ha escrito un tuit 'tranquilizando' a los que han manifestado preocupación por la situación crítica del Govern catalán: «Estará Salvador Illa para acudir al rescate... lo estaba deseando». Los populares consideran que el PSC, con 33 escaños, tratará de dar aire a Aragonès en el Parlament. Para valorar las consecuencias de la consulta de Junts, la dirección de los socialistas catalanes han convocado de manera urgente y extraordinaria a la dirección para el lunes por la mañana.

También ha valorado rápidamente la situación el líder de Cs en Cataluña. Carlos Carrizosa ha señalado que «el 'procés' ha dinamitado por la mitad a la antigua Convergència» y ha indicado que, en su opinión, «pase lo que pase con el Govern, es el suicidio del 52%», recordando la referencia que los partidos independistas hacen del voto a formaciones secesionistas en las elecciones del 14-F. Y ha criticado que los socialistas se haya ofrecido al Govern para dar «estabilidad».