Dos de cada tres alumnos de Castilla y León estudian religión en las aulas, once puntos más que la media nacional

Así lo recogen en una nota de prensa enviada a los medios de comunicación las Delegaciones de Enseñanza de las once diócesis de Castilla y León. En ella subrayan que pese al «notable rechazo social» que generó la 'Ley Celaá', y a que esta en algunas comunidades autónomas ha producido «un evidente deterioro en la enseñanza de religión», no ha ocurrido lo mismo en Castilla y León, consecuencia que los responsables de educación achacan al «diálogo permanente» que han tenido con la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León.

Esta buena sintonía ha permitido, a su juicio, «mantener prácticamente la misma carga lectiva de la asignatura en todos los niveles y avanzar en la búsqueda de un modelo de respeto hacia la efectiva libertad de elección de las familias y de la normalización progresiva del estatus del profesorado de religión».

Los delegados diocesanos respaldan estas valoraciones con datos obtenidos de un estudio realizado en prácticamente la totalidad de los colegios públicos, concertados y privados de Castilla y León. Según esta radiografía, el 68,47% del alumnado del sistema escolar obligatorio (162.568 estudiantes), cursa el área de Religión.

Por niveles se distribuye de la siguiente manera: en Educación Infantil, de un total de 44.759 alumnos, 29.626 se matricularon en el área de Religión y moral católica, por lo que el alumnado para la primera representa el 66´19%; en Primaria, de un total de 112.530 alumnos, 78.498 se matricularon en el área de Religión (el 69,75%), y en Secundaria, de 80.247 alumnos, 54.534 cursaron Religión (el 67,95%).

Respecto a Bachillerato, esta asignatura se ofrece solo en el primer curso junto a otras optativas y ha sido elegida por 6.505 alumnos, de un total de 15.660 alumnos, situación que, aunque arroja un porcentaje inferior al de los niveles obligatorios, los delegados valoran «positivamente» por el formato en el que se ofrece el área en los centros de Castilla y León: cuatro áreas, entre las que se encuentra la de Religión, a elegir una.

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Destacan, además, que son cifras que están «más de once puntos por encima de la media nacional», por lo que las valoran «satisfactoriamente», aunque subrayan que se ha producido una disminución porcentual de matriculación que responde a «razones sociológicas» y a lo que a su juicio es «una mala solución legislativa por la excesiva politización» de la enseñanza de la religión

Los delegados diocesanos indicaron que en próximas jornadas se reunirán de nuevo con miembros de la consejería para presentarles propuestas concretas de mejora en orden a diseñar el marco escolar en el que se impartirá el área en el curso 2023-24.

En este nuevo escenario curricular, los delegados diocesanos preparan ya un encuentro regional de profesores que será previo a un congreso de carácter nacional en el que se compartirán buenas prácticas docentes que ayuden a mejorar la calidad de la formación del profesorado para que esta redunde en el mejor servicio a la educación de sus alumnos.