Fase 2: un segundo impulso a las ciudades

La apertura de los centros comerciales, al 40 por ciento de su aforo y con medidas de seguridad de obligado cumplimiento, como el continuo lavado de manos, las mascarillas o la distancia de seguridad, no fue un impedimento para que las grandes superficies recibiesen visitantes casi en la misma proporción que cualquier lunes anterior a la pandemia. Lo confirmó el gerente de Vallsur, en Valladolid, Pablo Pérez, quien aseguró que al término de la jornada pasaron unas 10.000 personas por sus instalaciones . Por ello, se mostró muy satisfecho, más aún si se tiene en cuenta que «la gente ha comprado».

Precisamente, Sara, dependienta en una de las tiendas de ropa, se reconocía sorprendida porque había más clientes de lo que se esperaba y «se deja más dinero en compras». «El comportamiento está siendo muy normal y la mascarilla y el gel está más que asumido», afirmaba.

También parece haberse aceptado con naturalidad los carriles de ida y vuelta que recorren todo el centro , las alfombras que obligan a limpiar el calzado a la entrada, o los dispensadores de gel en cada tienda a la que se accede. Ana y Raquel, madre e hija, se mostraban encantadas de poder hacer sus primeras compras porque «tanto internet ya era un rollo». Salían de otro local en el que la dependiente afirmaba que «llevo todo el día desinfectando ropa», pero también se sentía feliz porque «hay clientes y la gente está concienciada». Más expectante estaba una de las limpiadoras de los baños, María José, que limpiaba cada inodoro después de ser usado.

También el centro comercial «Río Shopping», el mayor de la Comunidad, retomó su actividad así como los establecimientos de El Corte Inglés, que recibieron con aplausos a sus primeros clientes que esperaban la apertura, informa Efe.

Mientras, en el centro comerciale El Tormes, de Salamanca, las tiendas abrieron y regalaron a sus clientes un paquete de bienvenida, en el que se incluía una mascarilla. Además, l a fase 2 se ha podido comprobar en las carreteras de la provincia, donde ya han vuelto los radares móviles de la Guardia Civil; y en la Escuela de Tauromaquia de Salamanca, en el recinto ferial, donde a partir de las cuatro de la tarde comenzarán las clases.

En Soria, «Camaretas», de Golmayo, reabrió más de sesenta tiendas, especialmente de textil. El gerente, Félix Sanz, señaló que las tiendas regresaron a la actividad con «muchas ganas».

La hostelería también notó el cambio de fase al poderse abrir los establecimientos al público, aunque sólo con el 40 por ciento del aforo y sin barra. En León la Asociación de Hostelería y Turismo calcula que 700 de los 1.200 establecimientos están operativos , lo que ha permitido recuperar más de la mitad del empleo suspendido. Desde la Asociación confían en que el hecho de que se pueda aprovechar el interior de los establecimientos hasta un 40 por ciento de su aforo supondrá un importante paso hacia la normalidad del sector.

Mientras, en Segovia, unos 20 bares y restaurantes se sumarán esta semana a la veintena que ya había abierto, aunque sólo lo harán aquellos que también tienen terraza porque si no, «no es rentable», según informó el presidente de la Agrupación Industrial de Hosteleros Segovianos, Enrique Cañada.

En Ávila la entrada en esta nueva fase se produjo con cautela y algo más de actividad en el día a día de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad que hasta el miércoles no abrirá al público una parte del adarve de la muralla al público -gratis- y el Centro de Recepción de Visitantes.

En Zamora, se produjo la reapertura para visitas turísticas de trece iglesias románicas y en Palencia, la reapertura de la piscina climatizada de Campos Góticos permitió el primer chapuzón de muchos aficionados a la natación.