Un ladrón multirreincidente vuelve a ser detenido por robar en el interior de vehículos en Villacañas

sucesos

Dos guardias civiles lo sorprendieron de madrugada cuando rompía una ventanilla de un coche e introducía medio cuerpo. Está en libertad provisional y debe firmar en el juzgado cada mes

El aviso providencial de un vecino al 091 permite detener 'in fraganti' a ladrones de catalizadores 

El detenido, custodiado por dos agentes uniformados guardia civil

Al viejo conocido lo pillaron con las manos en la masa en medio de la oscuridad de la noche. Fue en la localidad toledana de Villacañas, donde una pareja de la Guardia Civil lo sorprendió sobre las dos y veinte de la madrugada del ... domingo pasado. Ocurrió en el aparcamiento de un restaurante que este ladrón multirreincidente, un español de 28 años, había convertido en su 'zona de acción'. Lo vieron romper la ventanilla de un coche y meter medio cuerpo en el interior. Sacó dos bolsos, que volvió a introducir descaradamente en el automóvil al verse acorralado.

Los agentes lo arrestaron por un delito de robo con fuerza en el interior de vehículo, aunque los investigadores le atribuyen siete más en ese mismo aparcamiento y un octavo que sucedió a medio kilómetro. En un caso utilizó una tapa de alcantarilla -un método en desuso- y en otros, piedras. Además de pequeñas cantidades de dinero como botín, los daños están valorados en unos 2.000 euros, aunque falta la tasación pericial de las reparaciones de los desperfectos.

Es un ladrón de coches que rompía generalmente la ventanilla del copiloto para colarse. No ha trascendido por qué tenía esta preferencia, que sí pudo dar alguna pista a los investigadores del puesto de la Guardia Civil de Villacañas, donde es conocido por su larga trayectoria delictiva y la multitud de antecedentes que acumula por delitos contra el patrimonio.

Arranca la investigación

Dos denuncias por robo en el interior de sendos vehículos aparcados junto a una restaurante de este pueblo de 10.000 habitantes alertaron a los agentes. El 25 de febrero comenzaron con sus pesquisas y, un día después, volvió a ocurrir en la misma franja horaria -siempre de madrugada- y con el mismo procedimiento. Sin embargo, había una llamativa variante: el tercero robo sucedió a 500 metros del restaurante.

El delincuente repitió el 19 de marzo, según la investigación de la Guardia Civil, y lo hizo a lo grande: cuatro robos en el interior de vehículos estacionados en el aparcamiento del establecimiento de comidas.

Varios de los robos se quedaron en el intento, pero otros se consumaron, llevándose el autor bolsos con cantidades de dinero que rondaban los 180 euros. En cualquier caso, la presencia de un ladrón de coche generó alarma social, que se acalló cuando dos guardias civiles sorprendieron al asaltante la madrugada del Domingo de Ramos. Pasó a disposición judicial y salió en libertad provisional con medidas cautelares, como la de presentarse en el juzgado cada mes.

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