Este es el nuevo precio del comedor escolar en Andalucía para el curso que empieza en septiembre

La fecha está marcada en el calendario de muchos hogares dado el revuelo generado por la subida de las tarifas del comedor escolar, aprobada hace semanas por el Consejo de Gobierno andaluz y recogida como tal en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía del pasado 2 de agosto. La actualización planteada por el Ejecutivo Regional cifra ahora la tarifa diaria en 5,54 euros, 56 céntimos más que los que debían pagar los padres hasta el pasado junio, y casi un euro más que la cuantía estipulada durante el curso precedente.

Si se traza el cálculo anual, la subida en cuestión deja un total de 1.002,74 euros, suponiendo que el niño deba hacer uso del comedor los 181 días que establece el calendario escolar en Andalucía para el próximo curso 2024-2025.

Según la Organización de Consumidores, el comedor supone para los padres de estudiantes de enseñanza concertada 140 euros mensuales de media en España, que escalan a los 155 euros cuando las instalaciones son de titularidad privada.

Esta es, sin duda, la principal carga económica de los familiares derivada de la Educación, salvo en los casos en los que hay que satisfacer el pago de una matrícula, obviamente.

Por su parte, y a diferencia de la actualización de la Junta en 2023, se han congelado el precio tanto del aula matinal como de las actividades extraescolares. Se seguirá pagando al mes 17,51 euros (1,33 euros por día en el caso concreto del aula matinal).

Volviendo al sondeo de la OCU, las extraescolares que se imparten en centros públicos de España conllevan 76 euros al mes de desembolso, que son 92 cuando la institución es concertada o 112 si la opción formativa es privada. Los uniformes se situarían entre los conceptos que más aumentan la cuenta final, hasta en 188 euros más.

La inminente ayuda de la Junta, pensada para alumnos de segundo ciclo de Infantil, Primaria, ESO, FP de Grado Básico y Educación especial, ofrece gratis —o con reducción— los tres servicios.

Sin embargo, los beneficiarios son sectores muy concretos de la población, pues con ello se pretende favorecer la situación de familias en dificultad social extrema o riesgo de exclusión, o directamente bajo la tutela de la Administración Pública; la de descendientes de víctimas de terrorismo; hijos de mujeres que han sufrido violencia de género. También podrán suscribirse a la ayuda núcleos familiares con ingresos exiguos —en este caso, como una bonificación—.

Por otra parte están los casos puntuales de alumnos que estén obligados a desplazarse fuera de su localidad porque no haya opciones educativas, siempre que tengan un turno partido y no exista fórmula de transporte escolar que les acerque a su domicilio en la pausa del mediodía. O de aquellos que dependan del transporte escolar y el horario de éste les obligue a permanecer 30 minutos en el colegio pese a haber concluido la jornada matinal, aunque no tengan que volver por la tarde.

Para todos ellos se abren siete días de solicitud para hacer más llevadero todo lo que implica volver al pupitre.