El Gobierno central y la Junta de Andalucía se reúnen este martes para hablar de la Ley de Doñana a solo una semana de aprobarse

La ley, iniciativa del PP y Vox, ha encontrado durante su tramitación la oposición del Gobierno central, de la Comisión Europea y de organizaciones internacionales como la Unesco, la agencia de la ONU para la conservación del patrimonio natural. El encuentro, confirmado a última hora de este lunes por la agenda de la Moncloa, a la que ha tenido acceso ABC, y adelantado por Diario de Sevilla y el Periódico de España, se produce a solo una semana de que el Parlamento de Andalucía apruebe la polémica norma, casi sobre la bocina para poder negociar algún acuerdo que evite su trámite final.

La convocatoria, en realidad, ha pasado desapercibida porque la Junta no la ha comunicado. Ni rastro de la reunión en la agenda que cada jornada publica el Gobierno andaluz para el día siguiente. Solo figura en el orden del día de actividades del Gobierno central. Teresa Ribera «se reúne con el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, en el Palacio de San Telmo, en Sevilla«. Eso es todo lo que se sabe, al menos de manera oficial, sobre el encuentro.

El Ejecutivo de Pedro Sánchez y el de Juanma Moreno han mantenido un desencuentro continuo por la ley de regadíos desde el inicio de su tramitación. De hecho, el Gobierno central exigió la retirada del texto para sentarse a negociarlo con la Junta. Sin embargo, el PP andaluz se negó. Y, sin embargo, habrá encuentro en Sevilla. Está por ver, sin embargo, que la reunión sirva para reconciliar posturas, muy alejadas durante muchos meses.

La polémica ley de regadíos, cabe recordar, inició su andadura en la pasada legislatura. La convocatoria de elecciones en Andalucía el año pasado hizo que decayera y, tras la constitución del Gobierno andaluz, se retomó con el impulso del PP y Vox en el Parlamento de Andalucía. Desde entonces ha provocado encontronazos con los grupos ecologistas, con la Comisión Europea y, sobre todo, con los ministros del Ejecutivo de Pedro Sánchez.

De hecho este verano se vivió quizás el momento más tenso cuando Ribera acusó a Moreno de «señorito« y, más tarde, se hizo eco de una campaña de boicot a los productos del entorno del espacio natural. También lo hizo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez en un movimiento que desde Andalucía se interpretó como respaldo a la campaña contra los intereses de Huelva.

Así las cosas y con el avance de la tramitación parlamentaria, parecía poco probable un encuentro. De hecho, el Gobierno central había señalado que iba a presentar un recurso en el Tribunal Constitucional contra la ley según la aprobara el Parlamento andaluz. Ahora se abre una ventana que puede cambiar el guion. La reunión será a las cuatro y media de la tarde en el Palacio de San Telmo. Tras la misma, se verá si se mueven las posiciones o se repite el enfrentamiento.