Las prácticas en empresas de los alumnos de la Universidad de Córdoba crecen un 15 por ciento

En los últimos cuatro años, la oferta de prácticas en empresas e instituciones ha evolucionado. Se han sumado programas nuevos y otros han desaparecido o perdido protagonismo. El programa que más ha crecido desde entonces es el de Centros y Servicios de la Universidad de Córdoba , dirigido a estudiantes que realizan sus prácticas en la propia UCO. De las 127 becas de estas características que hubo en 2014 se pasó a 186 el pasado año, en torno a un 46 por ciento más.

El Real Decreto del Gobierno sobre las prácticas académicas externas, que obliga a incorporar al régimen general de la Seguridad Social a los estudiantes que realizan sus prácticas, es valorado con prudencia por la UCO a la espera de conocer el desarrollo que tendrá esta medida, de la que se conocen los objetivos pero no la fórmula de aplicación.

Lo que sí advierten desde la Universidad cordobesa es que, actualmente, los presupuestos de la institución académica no contemplan el desembolso que supondría la medida , lo que podría acarrear un grave problema económico de difícil encaje no sólo para la UCO sino para todas las universidades de España. Calculan que el coste en Córdoba podría llegar a alcanzar el millón de euros sólo para alumnos de grado, sin contar los de máster o la FP dual, que también se vería afectada.

Más allá de su importancia para la formación del alumnado, en un contexto de difícil acceso al mercado laboral para la población joven las prácticas extracurriculares suponen una puerta de acceso y una garantía para poder presumir en el currículum de la tan demandada experiencia laboral . En la oficina de prácticas de la UCO destacan que la inserción a través de sus programas existe. Sólo en el último programa sufragado a medias con la Diputación de Córdoba un 20 por ciento de los alumnos que realizaron prácticas en empresas firmaron después un contrato de trabajo, y a menudo son antiguos beneficiarios de los programas de prácticas quienes se ponen en contacto con Ucoprem para gestionar convenios, ya como empleados a todos los efectos.

En los últimos años la UCO se ha esforzado por garantizar que las prácticas extracurriculares cumplan su función y evitar posibles abusos por parte de las empresas y de los propios alumnos beneficiarios. Para ello es fundamental la figura del orientador , que hace las veces de mediador entre el estudiante y la empresa, y la carta de aceptación , una suerte de «precontrato» que especifica desde el sueldo a percibir hasta el horario de trabajo, pasando por las funciones específicas que va a desarrollar el estudiante en su puesto como becario.