Lar nunca barajó menos de 105.000 metros cuadrados para su centro comercial de Córdoba

El último documento elaborado por García del Barrio y De La-Hoz data del pasado mes de noviembre. Refleja las negociaciones realizadas tanto con la anterior corporación como con el nuevo equipo de gobierno de PP y Cs. En ese momento, Lar planteaba un centro comercial y de ocio que ocupaba 105.800 metros cuadrados exactos . El reparto de usos arrancaba en el puente de San Rafael con dos pastillas de equipamiento. Justo enfrente del pabellón de la Juventud, tras el edificio de Procono, arrancaba el centro comercial que llegaba hasta la glorieta que divide el Sector Sur del barrio del Guadalquivir, de donde partía una pasarela peatonal sobre el río . Desde esa zona hasta el puente de Andalucía, se establecían tres grandes manzanas residenciales de 35.000 metros cuadrados cada una separadas de la Ronda por dos parcelas de equipamiento.

El último documento de Lar establece cinco alternativas de ocupación del territorio con números muy similares. Es decir, casi la mitad del sector dedicado a viviendas. La otra mitad -en realidad, supera por poco el 50%- a superficie terciaria comercial y de ocio en una «supermanzana». De las cinco alternativas, ya hay una que es la preferida por la empresa y la que es mejor vista desde el punto de vista técnico en Urbanismo. Es la alternativa 4 .

Consiste básicamente en respetar en parte la ordenación del Cordel de Écija que estableció el PGOU para la zona contigua al puente de San Rafael. Aquel documento, elaborado por el equipo de José Seguí, creía que lo conveniente es crear viviendas como una nueva fachada fluvial de la zona sur . Ese proyecto se respeta mediante la configuración un plan especial de reforma interior que, visto en un plano, tiene forma de L. Eso es así porque respeta las construcciones más modernas de la acera norte de la avenida de Cádiz como el Burger King, el Lidl o la sede de PTV Telecom.

El espacio residencial concluye en el nuevo puente del Botánico . El documento se olvida de la pasarela peatonal para acabar la glorieta de la calle Algeciras -frente al Mercadona- que es en realidad el arranque del nuevo paso fluvial que daría un acceso directo al ecopunto existente junto al Zoo y a las instalaciones de Loyola. El planteamiento del trabajo realizado es que un desarrollo como el que se está planteando exige de una mejora de las condiciones de accesibilidad que, en este tipo de casos, dependen del tráfico rodado ya sea público o privado.

El actual Hotel Oasis sería, según el planteamiento negociado entre Lar y Urbanismo, el arranque del espacio comercial y de ocio que se quiere emprender. Con las magnitudes que se barajan actualmente, se estaría hablando de unos 110.000 metros cuadrados en total. El plan diseñado consiste en la creación de una supermanzana divisible en manzanas más pequeñas con las que ir generando los usos comerciales y de ocio.

En lo que se está trabajando no es un modelo de centro comercial y de ocio cerrado similar al Hipercor de la Ronda. Es decir, en un edificio en altura donde los usos se van generando en las distintas plantas. En lo que se trabaja desde el principio es un modelo en el que con una gestión unitaria se cree un «barrio comercial y de ocio» con calles interiores y zonas verdes de propiedad y mantenimiento privado. El negocio creado en Sevilla por la misma empresa, Lagoh , está distribuido en torno a una gran zona verde presidida por un estanque artificial.

La mancha de zona terciaria engloba a una serie de negocios de la zona, lo que eleva las complicaciones. En esa circunstancia se encuentra la estación de servicio de la avenida de Cádiz, instalaciones de una empresa de autobuses o del centro Reto . Para ubicarse geográficamente, todo lo que se encuentra en la acera de enfrente del hotel Exe de la avenida de Cádiz. El planteamiento urbanístico en el que se trabaja remata el contacto con el puente de la Ronda con un plan parcial residencial con forma cuadrada y que ubica justo frente a las instalaciones del centro comercial del Guadalquivir.

Los promotores de la zona tendrían que asumir dos cargas urbanísticas. La construcción del puente y el ajardinamiento del sistema general del parque de la Ribera , que tiene miles de metros cuadrados. Es decir, el contacto con la orilla. Si el proyecto cuenta con los votos necesarios, Urbanismo tendría que negociar los acuerdos correspondientes para establecer cuánto vale eso. Hoy comienzan las negociaciones políticas con el objetivo de informar a los grupos municipales y los principales poderes de la ciudad de qué es lo que se pretende. El cogobierno se plantea una campaña amplia de información para dar a conocer una cuestión que podría tardar años en resolverse.

Uno de los elementos que no ha quedado prefijado es la ubicación de los equipamientos de carácter público que se generarían en el sector. Se entiende que el desarrollo de zonas deportivas, reservas para centros escolares o de carácter social ha de quedar condicionado a cada uno de los instrumentos de planeamiento que se prevea desarrollar. Sí se plantea que las viviendas se generen dentro de una gran zona ajardinada.