Antonio Varo, epidemiólogo: «Puede que nos quede un año de Covid y que nos sigamos vacunando»

¿Esperaban ustedes este repunte de los contagios?

En cierto modo es lógico porque han acabado las medidas restrictivas, hay una mayor movilidad y estamos en temporada de invierno, quiero decir que con frío, y claro, hay una parte de la población, que son los niños de menos de once años, que no están vacunados aún, además de que la vacuna no es efectiva al cien por cien. Todo esos factores influyen. Aparte, ha influido la variante Delta, y ahora estamos a ver qué va ocurrir o cómo va a influir la variante Ómicron . Lo que sí parece claro es que el punto de partida del repunte que conocemos es el que he descrito. Hay que decir que el repunte estaba previsto. Es posible que estemos ya en el punto álgido de esta sexta ola, o que se vaya a dar en una semana aproximadamente, y que después baje para volver a subir después de las fiestas de Navidad por los contactos sociales y la movilidad que va a haber. De todas maneras, esta sexta ola no está alcanzando el número de casos de las otras ondas epidémicas que hemos vivido.

Ha citado usted la llegada del frío. ¿Será clave para que la ola crezca?

Con el frío la gente se concentra más en interiores. ¿Por qué hay epidemias de gripe todos los años? Porque el frío afecta a la mucosa respiratoria y es más fácil contagiarse, porque el virus puede entrar con más facilidad a través de la mucosa respiratoria que se encuentra ligeramente dañada, además de que con las bajas temperaturas las concentraciones de las personas en el interior aumentan. No es lo mismo estar en la calle que estar en un lugar cerrado. La probabilidad de contagiarse en el interior es veinte veces superior a la del exterior.

Cómo les ha cogido a a los epidemiólogos esta sexta ola. ¿Les ha sorprendido mucho? ¿Llegan aquí cansados?

No, no. Ya le decía que este repunte se esperaba, aunque es verdad que a lo mejor no con tantos casos. Estamos en un compás de espera, a ver qué va a pasar en las próximas semanas. Pero lo que tenemos claro es que el coronavirus no va a desaparecer, porque está integrado en nuestras vidas como están integrados otros virus . No sé si todos los años habrá que volver a vacunarse porque haya cepas nuevas. Pero creo que después de esta ola epidémica, y de la siguiente que pueda haber por el invierno, pues ya habrá normalidad. Aunque es verdad que hay epidemiólogos que piensan que nos queda un año más todavía de coronavirus, y eso es probable. Habrá que ver cómo circulan las nuevas variantes.

¿Qué información tienen de la variante Ómicron? ¿Y qué previsiones?

En Córdoba no sabemos de ningún caso, aunque seguro que va a aparecer, y la mitad de los casos de Ómicron son de origen comunitario, no son de gente que viene de afuera . Esta variante será la predominante en las próximas semanas. Sobre esta variante se están haciendo estudios en estos momentos: las características que parece que tiene son que aumente la reinfección, y que quizás la vacuna sea algo menos eficaz con ella, y que al parecer es más transmisible que la Delta y que los casos son menos graves con menos ingresos y muertes.

¿Es partidario de imponer medidas restrictivas?

Lo que está claro es que hay que tener cautela. Hay que ser precavido. Hay que ponerse las mascarillas . Y tener siempre en cuenta que cuanto más contactos sociales tenga uno más riesgo habrá de contagiarse.

¿Le parece una medida acertada el pasaporte Covid?

Es una restricción oportuna e importante, y que evidentemente puede ser un freno para el nivel de contagios. Insisto en que a nivel epidemiológico este tipo de decisiones me parecen muy interesantes. Hay que tener en cuenta que dentro de los establecimientos de restauración bebes y comes y la mascarilla no la puedes usar en todo momento. Añado que el riesgo de contagio no desaparece totalmente porque estés vacunado, pero sí que se reduce muchísimo.

En una reunión privada o en una celebración familiar no hay pasaporte que valga. ¿Es ahí donde puede estar entonces el máximo riesgo de extensión de la enfermedad?

La clave en este caso es ser siempre cautos. Cada cual tiene que protegerse. No se puede evitar que la gente se reúna: lo que sí se puede hacer es recomendaciones, que es lo que se está haciendo, en relación a la higiene, al uso de mascarilla cuando se pueda, evitar la cercanía. Pero, claro, hay que contar con que ahora van a venir a vernos familiares con los que llevamos tiempo sin estar y el riesgo aumenta.

En Córdoba capital había este viernes una incidencia de 535 casos por cada cien mil habitantes. ¿Preocupante, no?

Sí que el riesgo es alto. Pero también hay que ver más cosas, como la capacidad y la presión asistenciales, la ocupación de las UCI... Por ejemplo, la semana pasada no hubo ningún fallecimiento. Eso quiere decir que aunque la vacunación no impida del todo la transmisión y la infección, sí que protege de la hospitalización y de los fallecimientos . Por eso, cuanta más gente se vacune, mejor será. En este sentido creo que es importante la administración de la tercera dosis, porque parece que la eficacia de la vacuna baja conforme pasa el tiempo. A quienes les corresponde esa tercera dosis, que ahora son los mayores de sesenta años, pues es una recomendación fundamental el que se la pongan, porque aumenta mucho la efectividad.

¿Dónde están viendo que se encuentra el foco de los contagios?

Hay una diferencia respecto a la quinta ola, cuando el foco de los contagios estuvo en la población joven, mientras que ahora el problema está en la franja de edad mediana. En los últimos 14 días, el 20 por ciento de los casos se han dado en personas que tienen entre 25 y 44 años, que es justo donde hay más contactos sociales.

¿Será determinante la vacunación en niños que la Consejería de Salud y Familias acaba de empezar?

Determinante no, porque afecta a un porcentaje pequeño de la población, pero sí que va a influir, claro que sí, porque va a frenar el contagio de los niños entre ellos y porque las probabilidades de que contagien a un adulto o a otros menores disminuyen, claro que sí.

El Hospital Reina Sofía ha reservado un módulo más de hospitalización y otro de UCI para estos enfermos. ¿Cree que será necesario contar con más espacios por el aumento de los contagios?

Todo depende de la variante Ómicron, que por lo que sabemos de otros lugares aumenta la transmisión de un modo exponencial, aunque la letalidad de esta variante es menor de las que hemos conocido hasta ahora. Mi opinión es que hay que estar preparados para lo que pueda venir, porque al aumentar los casos va a ser necesario más sitio libre en las unidades de cuidados intensivos .

La gripe común alcanzará su máxima incidencia en las primeras semanas de febrero, y se puede juntar con el repunte del coronavirus...

La gripe empezará a subir a final de este diciembre, porque en la actualidad se encuentra en niveles muy bajos : hay muy pocos casos que se estén diagnosticando, por lo que estamos por debajo del umbral epidémico. Sabemos lo que sucedió el año pasado, que fue que la gripe casi desapareció, como ocurrió con otros virus, como el virus respiratorio sensitial. Este último virus sí empezó a aumentar hace un par de meses. ¿Qué va a pasar con la gripe? Pues algo parecido. ¿Por qué este cambio? El año pasado estábamos todos con las mascarillas puestas y este año no, y las medidas del año pasado eran mucho más restrictivas que las de ahora, por lo que las posibilidades de contagio eran mucho menores. No olvidemos que la vía de contagio son exactamente las mismas en un caso que en otro, quiero decir en el caso de la gripe y del coronavirus. Puede coincidir en una persona la gripe y el Covid, pero no es frecuente, es raro.

Los autotest que se venden en las farmacias sin necesidad de que haya una receta médica vuelan en los mostradores. ¿Es lógico, no?

Sí. Lo que está establecido es que si el test da positivo hay que confirmarlo con una PCR, y si da negativo no requiere otro prueba más aunque no supone un resultado definitivo. La sensibilidad de estos test es más baja entre las personas asintomáticas, que son sobre todo las personas que lo usan para ir a una reunión de amigos o otro tipo de evento.

La Atención Primaria se tensiona de nuevo y llega Navidad, con menos efectivos. ¿Puede suponer un problema si la sexta ola va a más?

Evidentemente la presión que padece la Atención Primaria es superior cuando aumenta el nivel de contagios, y eso es importante saberlo y es necesario tenerlo en cuenta.