La Fiscalía eleva a asesinato su calificación para el acusado de matar a un hombre en Moreras en 2017

El fiscal expuso ante el jurado que se trata de un crimen con alevosía . Es decir, que la puñalada mortal que se asestó a la víctima fue sorpresiva, sin que esta pudiera defenderse o preverla de algún modo, como así lo aseguró el hermano de la víctima, presente en el patio en el momento de los hechos. Aseguró que el acusado llegó con las manos juntas y sin un arma visible, y a los pocos segundos, su hermano yacía en el suelo. Según el relato de los hechos expuesto por el representante del Ministerio Público , «Antón regresó al patio con las manos juntas en el pecho, diciendo “paz, hermanos, paz”, para que confiaran en él, y acto seguido, una vez se encontraba frente a frente a su víctima, sacó un machete que llevaba escondido y le asestó una fuerte puñalada que le atravesó el corazón».

Según el fiscal, el acusado tenía claro ánimo homicida, y dirigió el arma de forma certera y contundente contra el lado izquierdo del tórax de la víctima, a la altura del corazón. De la fuerza que ejerció aparece rasgada una costilla de la víctima, recordó el fiscal a los miembros del jurado popular. Posteriormente, el acusado y su hijo, «que estaba allí por petición de su padre pero que no queda probado que supiera la intención del mismo», huyeron del escenario del crimen . El fiscal solicita una pena de 18 años de prisión para el encartado y tumba de esta manera la posibilidad de una eximente completa por legítima defensa.

La defensa del acusado también modificó su calificación , ya que reconoció que «la legítima defensa es difícilmente encuadrable porque es desproporcionada la respuesta del acusado ante una riña en la que resultó golpeado». De esta forma, la defensa del acusado califica los hechos de homicidio pero solicita la aplicación de las atenuantes de arrebato , de confesión y de entrega inmediata a la Policía, además de la eximente incompleta por consumo de drogas. Estas atenuantes, a juicio del Ministerio Público, no podrían tenerse en cuenta en su mayoría, excepto una atenuante mínima por consumo de drogas ya que la confesión sólo sería válida si esta fuera totalmente veraz y no introdujera aspectos que podrían perjudicar la investigación de los hechos, como así ha sido.

Por su parte, la acusación particular mantuvo su calificación de asesinato para el padre y para su hijo como cooperador.