La dura situación que intenta remontar el sector de la automoción en Córdoba

Las caídas de ventas hasta ahora son prácticamente totales —sobre un 90 por ciento, detallan hasta ahora tras dos meses sin actividad—, la previsión hasta final de año será tratar de ceder con muchas dificultades algo menos del 50 por ciento de la previsión anual, el horizonte puesto en una recuperación real en el primer trimestre de 2021 y sobre todo la unidad total de reclamar ayudas públicas al gobierno para que los empleos, ahora mismo sobre la mitad del personal y generalmente a media jornada, pueda salir de los ERTE de fuerza mayor.

La sensación general también tiene sus matices. Todos los concesionarios y talleres tienen clarísimo que la postventa (reposición de materiales, revisiones, averías y chapa) se recuperará antes que las ventas, notablemente estancadas y todavía muy dependientes de las operaciones que se quedaron sin concluir antes del estado de alarma. De hecho, los talleres son ahora mismo el corazón que mantiene vivo al sector, según reconocen.

Incluso, la situación es posible que permita sostenerse mejor a las marcas de vehículos «premium» , con coches de alta gama, que a las «generalistas», más vinculadas a otro tipo de cliente. Con todo, las palabras más repetidas son la nube de incógnitas e incertidumbre que existe ahora mismo. Todos coinciden en que será la evolución sanitaria de la pandemia y las que medidas que se adopten por ella las que marcarán su presente y sobre todo su futuro hasta fin de año. Además, con un problema añadido, que es el coste que supone mantener un stock muy alto al que, de momento, no han podido dar salida.

Las medidas de protección son máximas: coches cerrados, desinfección si algún cliente entra en él, geles, mascarillas y guantes obligatorios y un cliente por zona de venta. La vuelta a la actividad es total en los concesionarios, salvo alguna excepción ahora mismo (Skoda).

Lamberto Muñoz, gerente y jefe de ventas de Ford , explica que las pérdidas en los cuatro meses y medio de 2020 son «grandísimas» y estarían sobre un «80 ó 90 por ciento», después de dos meses sin actividad. En la misma línea, Manuel Espartano, jefe de venta de Kia , insiste que las caídas están cifradas sobre un «90 ó 95 por ciento». Un auténtico drama.

Las perspectivas hasta fin de año son quizás algo mejores, pero dependerán de la pandemia. Sebastián Serrano, director financiero de Corhyund , detalla a ABC que la previsión global del sector es de un «30 por ciento», pero que lo más probable es que sitúe sobre «el 50 por ciento» el 31 de diciembre. En la misma línea se expresa Miguel Díaz, director de Land Rover y Jaguar . «Las cifras» de este año podrían quedarse en un desplome de un 40 por ciento. «Un batacazo», en palabras de algún vendedor de Hyundai, aunque «en dos días ya hemos cerrado operaciones».

En Talleres Castro , concesionario de Seat , su gerente, Lolo Castro, reconoce que la situación «es bastante complicada» para salir a flote. Por eso, hay unanimidad en el sector en reclamar «ayudas públicas para que la industria» salga a flote. La mayoría de los concesionarios ha recuperado la actividad con apenas la mitad de la plantilla y casi todos «al 50% de la jornada, salvo excepciones», apunta Díaz.

En este sentido, Serrano, de Corhyund , insiste en que «sin trabajo o sin movilidad, no hay personas que compren coches». Por eso, propone medidas como «carencias en los préstamos en los primeros meses o nuevas políticas de precios» para avanzar.

Castro detalla que «los talleres se están recuperando mejor con los cambios de baterías, las revisiones, alguna pequeña avería y sobre todo la chapa, que los clientes están aprovechando». Lo certifica Muñoz:«La postventa es la que mejor se está comportando ahora mismo».