Pasión en Córdoba
San Lorenzo recibe el cálido fervor popular en su vuelta a las calles de Córdoba
La imagen del mártir que murió en la parrilla bendice su barrio en la procesión tras dos veranos de obligada ausencia
San Lorenzo mártir regresa a su cita en las calles con los devotos de Córdoba
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Córdoba
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Iniciar sesiónSan Lorenzo se acaba de unir este miércoles, día de su festividad, a la amplia nómina de imágenes sagradas que retornan victoriosas a las calles en sus manifestaciones públicas de fe, tras dos veranos sin poder hacerlo.
El rojo, color de la sangre ... y el fuego, lo expresa todo sin necesidad de muchas palabras. El día de San Lorenzo se llena de esta tonalidad. Está en los claveles que adornan su paso procesional.
Rojo es el color del fervor con el que los feligreses de la parroquia que lleva su nombre le rezan cada día y, cómo no, de esta calurosa tarde-noche en la que han escogido estar en Córdoba en vez de huir a lugares más frescos.
Rojo es el color que se asocia al martirio que, por su fe, sufrieron y sufren a lo largo de los siglos miles de personas por sus creencias. Rojo es el color de las brasas sobre las que fue condenado a morir San Lorenzo.
Al ambiente de fiesta contribuyen los sones de la Agrupación Musical Jesús Caído de Montoro, que este año participa en el desfile, con obras de corte litúrgico.
La imagen de San Lorenzo mártir, con la parrilla en la mano, ha comenzado como siempre regalando la hermosa postal de salida desde su sede, el inconfundible templo fernandino.
Congregados en torno al santo, llamados por la parroquia y la hermandad del Calvario, del que es cotitular, los presentes, incluidas las otras cofradías de esta iglesia (Entrada Triunfal, Ánimas, Villaviciosa) más el Prendimiento, recuerdan que murió condenado a un lento martirio ordenado por el emperador romano Valeriano.
¿La razón? Su trabajo de entrega a los demás. La luz de los cirios en el cortejo recuerda la cruel forma en que fue condenado a morir. Eso sí, ésta es una jornada jubilosa desde por la mañana, cuando un nutrido grupo de niños participó en juegos propuestos por la parroquia en torno a San Lorenzo para fomentar el conocimiento y la fe en torno a él.
San Lorenzo se alza sobre su paso, que adquirió la parroquia a la cofradía de los Gitanos de Granada y ya lució en la procesión del 10 de agosto de 2019. Se encuentra sobre la peana de la Virgen del Mayor Dolor y luce la reliquia. Avanza a las órdenes del capataz David Arce.
En aquel entonces, hace dos años, nadie podía presuponer los dos años de parón que se venían encima. Aunque los cultos sí se mantuvieron. Este verano iluminan a San Lorenzo los candelabros de la Virgen del Socorro de Córdoba, cedidos por la hermandad.
De especial significación resultan los momentos en los que se detiene en la iglesia del Juramento y en el santuario de María Auxiliadora, dos de las grandes devociones de este lugar.
San Lorenzo nació en Huesca en época romana y fue nombrado el primero entre los siete diáconos de Roma en tiempos del Papa San Sixto II. Por esa razón tenía que atender a los pobres y estar al cuidado de los bienes de la Iglesia.
Es una de las devociones de mayor arraigo en España y así es también en Córdoba. Defender a pobres, leprosos y enfermos, y considerarlos los verdaderos tesoros de la Iglesia le costó la vida, pero el calor de su lección permanece vivo.
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