Este gigante de la defensa mostró su interés en marzo en hacerse con más terreno en Rabanales 21, donde ya se encuentra plenamente implantada en lo que fueron las instalaciones de la extinta Silos Córdoba. Eso sí, ése fue el momento en que se conoció, porque realmente esta venta pública tenia sus raíces en un escrito de EM&E, de 24 de julio de 2024, en que ya mostraba interés por unos suelos del tecnoparque calificados como IDR; es decir, con uso de fabricación y un mínimo de un 15% de la misma dedicada a investigación y desarrollo.
El Ayuntamiento activó en el citado mes de marzo el mecanismo habitual en estos casos. Los suelos que interesen a una empresa en concreto deben sacarse a concurso público por si alguna más quiere hacerse con ellos. En este caso, se abrió una licitación por valor de 1,59 millones (IVA no incluido, pues se abona con la adjudicación) que permitía hacerse con 16.528 metros cuadrados, distribuidos en cuatro parcelas, que conforman una manzana aledaña a su fábrica.
Una planta con una evolución espectacular
Parecía un proceso expédito. Pero el perfil del contratante de la Gerencia de Urbanismo acaba de publicar que la resolución es que se declara «desierto». Cuando la mesa de contratación se reunió para abordar este concurso se encontró con que «en la Plataforma de Contratación del Sector Público no se había presentado ninguna oferta».
La evolución de la planta de EM&E Group en la capital ha sido espectacular. En sólo un año, la firma ya emplea a casi 100 personas y espera elevar esa cifra a 300 en el horizonte de 2030. Su proyecto estrella en sus instalaciones en Córdoba es el sistema lanzacohetes, que le ha contratado el Ejército de Tierra por 700 millones.
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