La asociación de pistacheros aspira a abrir este año su cooperativa

A finales de 2021 se puso en marcha una asociación a nivel provincial para estos productores con el nombre de Pistacor. Su presidente, Javier Risquez, informó a ABC de que la superficie de los socios de esta organización alcanza ya las 150 hectáreas, medio centenar más que hace un año, lo que supone un crecimiento del 50 por ciento.

Estas plantaciones se sitúan principalmente en las comarcas del Valle de los Pedroches y de El Guadiato, según indicó este dirigente, que son donde se encuentran las fincas de mayor tamaño en la provincia, aunque también cuentan con algunos agricultores de Castilla La Mancha. Según remarcó, «es un cultivo que cada vez va a más como demuestra el hecho de que muchos jóvenes se acercan hasta nuestra asociación para informarse y asesorarse para poder implantarlo en sus explotaciones, también de otras partes de Córdoba, como es el caso de La Carlota».

En este colectivo profesional tienen claro su objetivo principal para 2023, que no es otro que constituir una cooperativa. Risquez apuntó que su intención es que esta entidad les permita preparar y comercializar por sí mismos sus producciones y no depender de otras industrias para estos fines. En Pistacor ya llevan algunos meses en conversaciones con el Ayuntamiento de Villanueva del Duque para ubicar esta sociedad en este municipio pedrocheño, que es, además, donde se encuentra la sede de la asociación. «Estamos viendo algunos terrenos en la zona que son acordes a la entrada de camiones, por lo que esperamos cumplir con toda la burocracia para que sea una realidad en este año», destacó el dirigente. El primer paso, una vez que en enero se celebre una asamblea para renovar a la directiva de la organización, se dará en los próximos meses con la adquisición de una peladora y secadora, además de un espacio para poder almacenar los pistachos para su posterior venta.

En cuanto a los precios, Risquez reconoció que en el último año ha habido una pequeña tendencia a la baja, aunque resaltó que continúan siendo cotizaciones muy interesantes al situarse el kilo en el entorno de los cuatro euros, aunque depende de la variedad y del calibre. Además, recordó que las plantaciones que apuestan por este fruto seco tienen que esperar unos ocho años para conseguir la máxima cosecha, aunque en la mitad de tiempo ya se empieza a recolectar una pequeña cantidad.

«Nosotros consideramos que sigue siendo un producto rentable a pesar del incremento de los costes que hemos sufrido en el último año, sobre todo lo que tiene ver con los carburantes y los abonos», subrayó el máximo responsable de Pistacor.

Este directivo señaló que el hecho de que la zona Norte de la provincia se adapte bien para la siembra pistacho se debe a su necesidad de muchas horas de frío para conseguir un desarrollo correcto de la planta. Asimismo, indicó que estas plantaciones son tanto de riego como de secano, aunque, según detalló, estas han tenido una menor producción en la última campaña, que tienen lugar a principios de otoño, debido a la fuerte sequía.

Desde la asociación se destacó que otra de las mayores ventajas de este alimento es que se combina bien con el olivar al poder utilizarse la misma maquinaria, lo que abarata los costes de los productores, y al no coincidir las épocas de recolección. Finalmente, Risquez declaró que casi toda la cosecha que se registra en Córdoba se va a fuera de España, «mientras que los pistachos que se consumen aquí vienen, principalmente, de Estados Unidos al ser más baratos, pero su calidad es mucho peor que la nuestra, que se encuentra entre las mejores del mundo».