La nueva alcaldesa de Córdoba da por hecho que retirará el cuadro de San Rafael

Estae jueves, la regidora ha apuntado en la dirección de que también retirará los cuadros de temática católica que hay en el hall de Alcaldía. Y lo único que impide ser tajante del todo es que la primera edil, cual anguila, se ha escurrido de pronunciar un «sí» categórico.

Ambrosio ha afirmado, en alusión a las pinturas de la discordia, que los símbolos religiosos se irán retirando de forma progresiva para «respetar la laicidad» en el ámbito de lo público y para que todos los cordobeses puedan «disfrutar» de piezas que son obras de arte.

Repreguntar en busca de un claro «sí» o «no» fue estrellarse en un muro más grueso que el extinto de Berlín. No hubo forma de que dijera de forma expresa que sí los quitará, aunque siempre se movió en esa dirección. Ha reiterado que no se hará una retirada de golpe. «No se desmontará la Casa [por el Ayuntamiento] ni habrá un traslado deprisa y corriendo», ha dicho Ambrosio.

En el único momento en que ha arrojado alguna duda sobre la retirada de los cuadros, ha afirmado que «no hay una decisión tomada al respecto». Pero dio la sensación de referirse a que no hay fecha para trasladar los cuadros, porque inmediatamente después ha añadido que «los símbolos religiosos se irán retirando cuando tengamos un lugar para albergarlos». Los lienzos a quitar, no en vano, son de un considerable tamaño y deberán depositarse en los museos municipales.