Cultura tumba las alegaciones y autoriza la segunda puerta de la Mezquita-Catedral

Días antes de la Semana Santa , la Comisión de Patrimonio ya aprobó un primer visto bueno al proyecto que fue paralizado como consecuencia de las alegaciones presentadas por el arquitecto Rafael de La-Hoz Castanys a un proyecto que supone, en realidad, desmontar las celosías que su padre , el arquitecto y director general Rafael de La-Hoz Arderius, instaló en los años 70 en la zona recayente al Patio de los Naranjos para tapar varios de los arcos ubicados en la zona derecha de la fachada norte. Lo que hizo ayer la delegada de Cultura fue rechazar las alegaciones presentadas y dar información a las partes del procedimiento.

La vía administrativa queda cerrada y contra este tipo de determinaciones ya solo se pued e litigar en los tribunales . El arquitecto ha puesto el caso en manos de un equipo de abogados y nunca ha rechazado que pueda llegar a esa medida extrema.

Su oposición al proyecto se basa en alegar una cuestión de propiedad intelectual -que ha quedado descartada por parte de la Junta - y por un supuesto daño patrimonial que podría llegar, según sus alegaciones, a la comisión de un presunto delito contra el patrimonio.

El Cabildo ha estado años negociando una propuesta que ha pasado por distintos filtros . En primer lugar, optó por un proyecto muy ambicioso para actuar sobre todo el muro norte que sí planteaba algunas modificaciones sustanciales. Tras su estudio, la Consejería de Cultura optó por aplicar la norma que obliga a conservar el estado del monumento aunque se reconozca que es la parte de menor valor de un edificio Patrimonio de la Humanidad.

El último proyecto presentado es, apenas, una obra menor aunque nada de lo que ocurra en la Mezquita-Catedral puede serlo. El Cabildo y su equipo de arquitectos decidió presentar la medida que tendría menos incidencia dentro de todas las posibles. El proyecto consiste en la creación de otra celosía , con forma y materiales similares, que permita abatir las hojas como si fuera una puerta normal. Las celosías colocadas en los setenta, que no tienen en sí mismas un valor histórico destacable, son elementos fijos.

Todo depende ahora de la Gerencia Municipal de Urbanismo . El anterior responsable del organismo local, el popular Luis Martín, aseguró en su día que todo estaba preparado para darle la licencia de obras al Cabildo con el propósito de acelerar, en lo posible, todos los trámites. Ese permiso nunca se pudo tramitar aunque los informes eran todos positivos por la interposición del recurso administrativo por parte de la familia del arquitecto cordobés, que se acaba de desestimar.