Andalucía cierra su mejor año hidrológico desde 2021 salvo en Málaga y Almería

El sistema hidrológico andaluz es complejo y está dividido en cuatro demarcaciones territoriales cada una con su sistema de embalses. La más extensa en cuanto a población y territorio es la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, de competencia estatal dado que abarca zonas de otras comunidades autónomas. Son más de 8.000 hectómetros cúbicos de reservas que abastecen sobre todo a Jaén, Córdoba, Sevilla, Granada,, Córdoba aunque también a zonas de Huelva y Cádiz.

Esta cuenca es la que mejor se ha comportado durante este año hidrológico que ha cerrado por encima del 30% en sus reservas y un total de 2.434 hectómetros de agua en los embalses. Es la cifra más alta de un cierre de año hidrológico desde el año 2020 en la Confederación. Y además se ha conseguido en un año en el que se ha recuperado el volumen de agua desembalsada para los regadíos de ejercicios anteriores con más de 1.000 hectómetros cúbicos de agua que se han podido aprovechar. Este proceso de desembalse está prácticamente finalizado y sólo restan 30 hectómetros cúbicos correspondientes a octubre. El otoño pasado arrancó con este sistema de embalses al 18% con 1.469 hectómetros cúbicos.

La segunda gran cuenca en cuanto al volumen de agua embalsada es la de Guadalete-Barbate, que abastece principalmente a la provincia de Cádiz, y que es competencia exclusiva de la Junta de Andalucía. En total tiene una capacidad de 1.152 hectómetros cúbicos que se encuentran en estos momentos al 23,3%, con en torno a 268 hectómetros cúbicos. Pese a ser muy bajo este porcentaje es superior al del cierre del curso 2022-2023 aunque se mantiene por debajo de los dos ejercicios anteriores cuando se llegó a superar el 30%.

El actual foco del problema de la sequía en Andalucía está en la cuenca mediterránea, que abastece al levante, a municipios de Málaga y Almerá. Las reservas han acabado este año hidrológico en un 23,3% con 268 hectómetros lo que supone su peor cierre histórico de un ciclo completo de lluvias. Las precipitaciones de primavera aliviaron pero no lograron cambiar la tendencia de pérdida de reservas como si se consiguió en otras provincias.

A la espera de que se reúna el comité de sequía de esta demarcación, coordinado por la Consejería de Agricultura, Agua, Pesca y Desarrollo Rural que tiene la competencia sobre esta demarcación, desde el 1 de octubre vuelven las restricciones en la Costa del Sol que quedaron suspendidas durante el verano para favorecer la actividad turística. De esta forma, queda prohibido el baldeo de calles, llenado de piscinas privadas, riego de jardines, parques públicos y privados, campos de golf, lavado de coches fuera de los establecimientos autorizados, fuentes ornamentales que no dispongan de circuito cerrado de agua, duchas y surtidores públicos.

En esta semana se analizará de forma más completa la situación tras este ciclo de lluvias aunque como punto de partida, de momento, está la decisión de que no haya restricciones de agua en el consumo humano tal y como, con carácter general, se ha mantenido hasta ahora. No obstante, se realizará un seguimiento de la evolución de las lluvias durante todo este otoño.

La tercera cuenca de competencia exclusiva de la Junta de Andalucía es la de Tinto-Odiel-Piedras-Chanzas que se encuentra en estos momentos al 37% con 426 hectómetros cúbicos sobre una capacidad total de 1.130 hectómetros cúbicos. En este caso, se encuentra mejor que el año pasado pero peor que los dos ejercicios anteriores.