Rubalcaba acusa al PP de buscar la «agitación» tras la agresión en Murcia
Los populares llevan el ataque al Senado y acusan al Gobierno de «pasividad» y al delegado de «incompetente»
PALOMA CERVILLA
El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, acusó ayer al PP de haber provocado «agitación» tras la agresión al consejero murciano Pedro Alberto Cruz con el objetivo «clarísimo» de «pescar en río revuelto» y defendió la necesidad de «ponerse del ... brazo» para trasladar a los violentos el mensaje de que no se aceptará nunca su participación ni sus acciones. Rubalcaba trató de justificar en el Pleno del Senado la posición del Gobierno respecto a la agresión sufrida por el consejero murciano después de que el PP decidiera incluir este asunto entre las preguntas de control al Gobierno, y el vicepresidente aplicó aquello de que la mejor defensa es el ataque.
El senador popular José Joaquín Peñarrubia recordó el clima de agitación que existía en Murcia durante las últimas semanas y reiteró la petición de destitución del delegado del Gobierno en la Comunidad, Rafael González Tovar, por «pasividad, manifiesta incompetencia y no haber previsto y evitado los lamentables incidentes».
El vicepresidente primero pidió al PP que no pretenda hacer creer a los ciudadanos que la culpa «de que algún desalmado» pegue a un consejero la tienen los socialistas y lamentó que, en ese caso, estarán tomando a los ciudadanos «por tontos».
El líder del PP, Mariano Rajoy, ya había recordado que el pasado 30 de diciembre avisaba en rueda de prensa que «la situación en Murcia se estaba complicando» pese a que, según dijo, «lo único» que hizo el presidente murciano fue «tomar decisiones para reducir el déficit público, como había planteado el Gobierno de España». Según añadió, el pasado sábado llamó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para manifestarle su «indignación» por la agresión al consejero de Cultura, así como su «preocupación» por lo que estaba ocurriendo en esta comunidad. Tras esa conversación, Rubalcaba le anunció que pondría en marcha un plan de seguridad para los miembros del gobierno regional murciano.
Desde el PSOE, el secretario de Organización, Marcelino Iglesias, defendió la actuación del delegado del Gobierno porque «no es fácil prever» un ataque como el que ha sufrido el consejero murciano. La ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, optó por condenar el ataque: «Es consejero de Cultura y tiene toda mi solidaridad y la condena absoluta de esta agresión».
Entre tanto, si todo evoluciona como hasta ahora, el consejero Pedro Alberto Cruz podrá acudir este domingo al Estadio Nueva Condomina, donde presenciará el partido entre el conjunto local y el Cádiz Club de Fútbol, tras ser dado de alta ayer.
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