Casado firma la paz con Aznar y Rajoy y se declara orgulloso de su legado

Aznar y Casado han entrado por separado a la Universidad Francisco de Vitoria, nada que ver con lo que ocurrió en otras ocasiones cuando se les vio bastante más unidos. Sí han tenido ocasión de charlar un poco antes del acto académico, en una sala anexa, mientras les colocaban los micros.

Al empezar su intervención, Aznar ha dejado claro que el acto no era ninguna celebración del triunfo de 1996 . Algo que le ha corregido en cuanto ha podido Casado, quien ha recordado que fue jefe de gabinete de Aznar, y también de Pizarro, allí presente.

Las primeras palabras de Casado han ido dirigidas a intentar firmar la paz con Aznar, después de que desde Génova se escenificara la ruptura con el pasado del PP, a raíz de las últimas consecuencias por la «confesión» de Bárcenas. «Pinchan hueso los que pretendan enfrenar a la nueva generación de dirigentes del PP con sus predecesores»; ha advertido Casado.

Además, el líder del PP ha asegurado que él sí quiere celebrar el 25 aniversario de la victoria de Aznar en 1996. «Es esencial estar orgulloso de un legado que es patrimonio de todos los españoles»,ha subrayado, un orgullo que ha extendido a las dos legislaturas de Rajoy.

En un acto moderado por Ignacio Camacho , en el que también han participado Manuel Pizarro, Isabel Estapé, y Manuel Álvarez Tardío, Casado ha repasado las similitudes que ve entre la trayectoria de Aznar y la suya, y se ha situado en 1991, cuando empezó la reunificación del espacio electoral de centro-derecha. Entonces, el PP empezó a conquistar ciudades como Madrid, una situación que ha comparado con la de los comicios municipales de 2019.

Respecto a las diferencias, el líder del PP ha explicado que en 1991 Aznar tuvo que llevar su partido donde está la mayoría centrada , al centro reformista y liberal: «Ahora tengo que llevar la mayoría social a la centralidad y moderación del partido».

En el debate, Isabel Estapé ha puesto el dedo en la llaga cuando ha criticado el Pacto del Majestic que firmó Aznar con Pujol, al considerarlo claramente excesivo. El expresidente del Gobierno ha defendido con vehemencia ese pacto, que permitió el apoyo de los nacionalistas catalanes a su investidura en 1996. Ese pacto, ha subrayado, era para toda España, y no para una región, significó más España, más nación, más empleo y más economía, según ha explicado.

Al final del acto, Camacho ha preguntado a Aznar si tenía algún consejo para Casado . Pero el expresidente del Gobierno se ha limitado a desearle suerte. "Cuando se tiene la responsabilidad de ser uno de los actores de la política española hay que marcar el camino, definir la estrategia t tomar las decisiones, pero eso le corresponde a él".

Estapé sí ha pedido a Casado que sepa mandar.