El Supremo archiva la denuncia contra Barcina y la consejera navarra de Economía

Tras estudiar el caso, el Tribunal Supremo ha llegado a la conclusión de que estos hechos no constituyen un delito porque las presiones que pudieran haber ejercido la presidenta y la consejera de Economía sobre su directora de Hacienda Tributaria «se encuadran en el marco de las relaciones y canales de comunicación que, por razón de sus respectivos cargos, debían mantener». Y añade que «las gestiones que, aunque ejerzan una presión moral indebida, no se dirijan a la obtención de una verdadera resolución».

No obstante, considera que pudiera tratarse de «conductas moralmente reprochables que puedan constituir infracciones disciplinarias u otros tipos delictivos».

Estas supuestas presiones fueron denunciadas por la propia directora de Hacienda del Gobierno de Navarra, aunque ella misma dudó que pudiera tratarse de un acto delictivo. La reacción ante las palabras de la directora de Hacienda provocaron la mayor crisis institucional que ha vivido Navarra a lo largo de esta legislatura ya que todos los grupos de la oposición anunciaron una moción de censura contra Yolanda Barcina, que gobierna en minoría, de la que los socialistas se echaron atrás en el último momento tras el veto por parte de la dirección federal del PSOE.

El Tribunal Supremo, que es el competente en esta denuncia al tratarse de dos personas, Barcina y Goicoechea, que son aforadas echa por tierra la justificación de la moción de censura y de la comisión de investigación que se celebró en el Parlamento de Navarra en la segunda quincena de febrero.