La duda de Jáuregui complica el cierre de la candidatura del PSOE

Pero ese escalafón no está a día de hoy tan claro. Fuentes de la Dirección Federal se resistían anoche a confirmar que Jáuregui sea el «número dos» y hacían un llamamiento a «no precipitarse». El exministro, fuera de España, reconoció a ABC: «no sé nada». «Les he dicho hace semanas que lo que decidan está bien. Me da igual ir (a Estrasburgo) que quedarme (en el Congreso)», decía... a 48 horas del Comité Federal decisorio. Fuentes socialistas andaluzas aseguran que ese posible desplazamiento de Jauregui del «número dos» a otro puesto inferior -o su renuncia- nunca vendría motivado por una presión de Susana Díaz para hacerse con el segundo puesto, ya que la presidenta andaluza cuenta con una candidata para el «número tres», cuyo nombre guarda con celo. El problema es que Jáuregui, a quien ya le costó encajar no ser él cabeza de cartel, no estaba dispuesto a ir por debajo del «dos» y eso complica el cierre de la lista.

Además del «número tres», Díaz ha pedido al secretario general otros dos puestos de salida (uno para Carmen Romero, eurodiputada desde 2009) y otro para un hombre, que no será el cuatro, en principio López Aguilar. Anoche también se daba por segura la incorporación del exvicesecretario general José Blanco -apadrinado por la Ejecutiva del PSdeG-, pero no en el puesto seis, como se especulaba, sino más atrás. Y es que Elena Valenciano quiere que se «visualice» en los seis primeros puestos a gente muy experta en Europa. Uno de ellos podría ser el secretario de Política Internacional del PSM, Borja Cabezón, apuesta de Tomás Gómez pero también del expresidente Felipe González.

En los 17 puestos de salida también tienen que haber hueco para la hoy eurodiputada castellano-leonesa, Iratxe García, y el eurodiputado castellano-manchego, Sergio García, éste último coordinador adjunto de la campaña electoral europea; así como para los candidatos del PSC: Javier López, elegido en primarias, y la secretaria de Internacional del PSC, Esther Niubó.