Elecciones Andalucía 2022
El PSOE andaluz pierde su autonomía: Ferraz controla las cuentas de la campaña
El partido pide a los ciudadanos que financien la candidatura con microcréditos que devolverán a un interés del 2,5%
El PSOE pide dinero prestado a los ciudadanos para financiar su campaña del 19-J y «frenar a las derechas»

El PSOE de Andalucía no controlará sus cuentas en una campaña electoral por primera vez en su historia. Será la dirección federal del partido de Pedro Sánchez la que lleve esta gestión de cara a los comicios del 19-J mediante un programa ... de microcréditos que están solicitando a los ciudadanos en las cuentas oficiales del PSOE en las redes sociales. Bajo el lema 'Ayúdanos a construir la Andalucía que quieres', solicitan el apoyo de los ciudadanos para que les presten dinero para «frenar a las derechas» y «defender nuestras libertades». Según consta también en la web donde se recaudan estos microcréditos se pide ayuda para que el PSOE de Andalucía tenga «más fuerza de combate» y el futuro de la comunidad autónoma sea de «progreso y justicia social».
Este nuevo modelo de gestión supone un salto cualitativo muy importante para el partido en Andalucía que siempre ha defendido su total autonomía de Ferraz no sólo por el modelo interno de los socialistas sino también por su fuerza e importancia en el conjunto de la organización. Porque la federación andaluza es la más numerosa de toda la organización, con 42.300 militantes y 823 casas del pueblo.
Pero será Ferraz quien controle los gastos de la inminente campaña electoral ya que en la sede federal están los responsables de la web para pedir y gestionar los microcréditos que se piden a los ciudadanos. El sistema es sencillo. Cualquier persona, siempre identificándose con nombre, apellidos y DNI, puede prestar entre 200 y 10.000 euros al PSOE que se lo devolverá con un interés del 2,5% en cuanto cobre la subvención correspondiente tras los comicios.
Es la primera vez que utiliza esta fórmula en Andalucía que siempre había recurrido a los bancos para financiar sus campañas electorales como el resto de organizaciones políticas. Podemos fue el primer partido que recurrió a esta herramienta y el PSOE la estrenó en la campaña de Ángel Gabilondo a la comunidad de Madrid. El PSM no disponía de fondos suficientes y esta fue la fórmula elegida que ahora se hace extensiva a Andalucía.
La pérdida del poder en la Junta ha supuesto una importantísima merma de ingresos para el PSOE andaluz, que se financia como todos los partidos según lo que dicta la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (Loreg) y la Ley Electoral de Andalucía. En este escenario, Juan Espadas tiene que hacer su campaña electoral a la Junta contando nada menos que con 6,6 millones de euros menos de los que tuvo Susana Díaz en 2018.
Las cuentas son claras. La principal fuente de financiación del PSOE andaluz es la subvención del Parlamento a los grupos políticos. Y el PSOE ha pasado de tener 47 diputados a sólo 33 lo que en términos económicos se traduce en 802.644 euros menos cada año. Así, el PSOE recibe 3.233.872 euros cada año frente a los algo más de cuatro millones de euros que percibía la legislatura pasada.
Hasta la campaña de 2018, el PSOE andaluz pedía un crédito en los bancos comerciales que luego devolvía con cargo a las subvenciones que recibía tras las elecciones. Lo habitual es que el PSOE (y el PP) acudiesen a la oficina institucional del Banco Popular en Madrid quien ya tenía experiencia y repetía la misma operación en cada campaña electoral.
Tras las elecciones, el banco cobraba el préstamo (que en el argot electoral se denomina anticipo) y nunca ha habido problemas con la Cámara de Cuentas que fiscalizaba el proceso totalmente legal. Con la fusión de este banco con el Santander, esta oficina cerró y por ello, el PSOE andaluz cambió de banco. El último año, el préstamo fue con Unicaja. Ahora, el equipo de Espadas no tendrá que preocuparse de los ingresos, sólo de los gastos.
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