Santander y Caixabank destacan que la banca está «muy bien preparada» y con «enorme fortaleza» ante las turbulencias bancarias

Prácticamente coincidiendo en hora, ambos directivos han dedicado parte de su intervención a trasladar a los accionistas que no tienen de qué preocuparse con sus entidades, ni con el sector en general en España. «Hoy el sector financiero regulado se encuentra en una situación sólida, mucho más que hace 15 años. En el caso de los bancos europeos, estamos sujetos a la regulación y supervisión más estricta del mundo. Como ha dicho el BCE, la banca europea es sólida, y tiene una posición holgada de capital y liquidez con la que poder hacer frente a episodios de volatilidad provocados por problemas específicos en entidades concretas«, ha señalado Botín.

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¿Cómo afronta el Santander esta situación? Pues la respuesta de la presidenta del banco ha sido que «muy bien preparado, gracias a la fortaleza de nuestro modelo de negocio y al trabajo de estos últimos años, durante los cuales hemos invertido en mejorar nuestro negocio».

Goirigolzarri, por su parte, se pronunció en la junta de Caixabank en términos muy similares. «Aunque los episodios de volatilidad pueden continuar, y siempre debemos ser prudentes, creo honestamente que la banca española, por contraposición a lo que vivimos en la anterior crisis, está muy bien preparada y tiene una enorme fortaleza para enfrentarse a este tipo de situaciones», ha dicho.

Al mismo tiempo, el presidente del primer banco por volumen de activos en España ha destacado que los episodios del Silicon Valley Bank y Credit Suisse son en entidades muy particulares y cuyo modelo de negocio nada tiene que ver con el español. Marca distancias, al tiempo que lanza un mensaje de tranquilidad.

Asimismo, Goirigolzarri aprovechó la ocasión para volver a pedir que se complete la unión bancaria en Europa, así como la creación de un fondo de garantía de depósitos comunitario. Algo en lo que también ha coincidido Botín en su intervención en su respectiva junta de accionistas.

Ana Botín, además, dio una muestra de apoyo pública a las empresas y los autónomos españoles. Unas palabras que llegan tras varios meses de ataques del Gobierno hacia estos colectivos, llegándose a personalizar en figuras como Juan Roig o Rafael del Pino. «La recuperación en España es gracias al liderazgo de millones de autónomos, pymes y empresas, quienes se esfuerzan cada día en mejorar sus empresas; gracias también a la mejora del turismo, un buen nivel de ahorro de empresas y familias, y el foco en reducir la dependencia energética», ha señalado.

También lanzó el mensaje de que se necesitan «reformas estructurales» en nuestro país para lograr converger con Europa en renta, bienestar y calidad de vida.

Goirigolzarri, también sobre economía española, fue muy claro al respecto de sus preocupaciones, poniendo el foco en la sostenibilidad de las finanzas públicas. Ahondó en la necesidad de definir «un plan de reconducción de nuestras cuentas públicas», al tiempo que comentaba que «la productividad es en mi opinión el principal punto débil de la economía española».

«Una baja productividad crónica a la que sólo se puede hacer frente con políticas desde el lado de la oferta. Y las políticas de oferta son sinónimos de reformas, reformas complejas porque necesitan acuerdos políticos y sociales amplios, los cuales en la actualidad parecen difícilmente alcanzables, pero no por ello son menos necesarios para el futuro de nuestro país», ha añadido.