Los economistas rebajan el crecimiento de 2023 al 1,5% y advierten de un frenazo inminente de la actividad

El presidente del Consejo General de Economistas, Valentín Pich, comenzó la presentación del Observatorio Financiero y Claves Económicas del segundo cuatrimestre de 2022 comentando el dato provisional del IPC de septiembre, situado en el 9%. «Pese a la bajada de un 1,5 puntos del IPC adelantado de septiembre, según datos publicados hoy por el INE, que pueden dar síntomas de moderación de la inflación, tan esperada, otros indicadores -tanto nacionales como europeos- siguen su tendencia decreciente, por lo que se prevé una desaceleración de nuestra economía - y de otras principales economías mundiales».

En referencia a la deuda pública, que se sitúa en el 116% del PIB español, las expectativas son negativas y todo indica a que la cifra aumentará en 2023, así como la tasa de paro, ante el aumento de las dificultades de las empresas para afrontar su pasivo por la restricción del crédito que supone las subidas de los tipos de interés llevadas a cabo por los bancos centrales. Tampoco ayuda el incremento del gasto público en los últimos meses, un 0,6% más en julio respecto al mes anterior y un 4% en lo que va de año respecto a 2021.

Pich ha afirmado que las administraciones deben actuar con «prudencia» y plantearse deflactar algún impuesto para compensar los ingresos extraordinarios de la Administración fruto de la inflación. También aboga por un pacto de rentas con subidas salariales contenidas desligadas de la inflación para evitar los efectos de segunda ronda, es decir, contribuir más a la espiral inflacionista.

El coordinador del observatorio, Salustiano Velo, ha destacado que las «subidas abruptas de los tipos de interés» no benefician tanto a España y Europa como a Estados Unidos, ya que en nuestro caso responde a la falta de oferta y no a un exceso de demanda como en el caso americano. Asimismo, ha añadido que el buen comportamiento del sector exterior y concretamente el turismo, permitirá a la economía española crecer en el segundo cuatrimestre del año. Sin embargo, ha destacado que nuestra economía sigue siendo la única de las cuatro grandes de la Eurozona que no ha recuperado los niveles previos a marzo de 2020, y no se espera que lo haga hasta 2024».

La segunda mitad del año no ha sido positiva para los mercados bursátiles, que llevan un 2022 «catastrófico» con fuertes caídas en los principales índices según ha explicado Montserrat Casanovas. «En España el problema de la inflación se ve agravado por la fuerte depreciación del euro que encarece las importaciones de materias primas pagadas en dólares», ha añadido Casanovas.

Por último, el director de Estudios del CGE, Salvador Marín, ha resaltado el empeoramiento en los índices de sentimiento económico y confianza empresarial, que presupone una caída en el consumo. A estos indicadores se les unen «los PMI, el índice de volatilidad VIX, el precio del TTF en el ámbito energético o los propios de movimientos de mercancías que o están más negativos unos o en máximos históricos otros, por lo que salvo que fuera una equivocación global, nos sitúan en el camino de la desaceleración de nuestra economía» ha concluido Marín.