La arriesgada decisión de Lunin, la resignación de Pep y la resurrección de Ancelotti: «El Madrid nunca muere»

El italiano no compareció en la habitual rueda de prensa. Cuando fue a hacerlo, estaba Guardiola, que se adelantó al italiano. Como visitante, tenía preferencia, pero Pep no estaba para esperar a nadie. Su cara nada tenía que ver con la de hace doce meses: «Decía Cruyff que la suerte no existe. Perder así duele, pero qué manera más cojonuda de perder. No sé qué podríamos haber hecho más. Felicitar al Real Madrid. Ellos lo hicieron mejor en la tanda de penaltis y están en semifinales. Este negocio se trata de resultados».

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Un resultado conquistado tras 120 minutos de supervivencia y una tanda en la que Lunin se desquitó de su error en el 0-1 de la ida. Se la jugó con Bernardo, y se la devolvió: «Antes de la tanda de penaltis hemos preparado todos los jugadores del City que podían lanzar. Había tres opciones para quedarse en el centro, sin moverse. Así que teníamos que arriesgarnos, y lo hicimos con Bernardo. Menos mal que salió bien»

En su habitual perfil bajo, el ucraniano quiso quitarse la medalla y ponérsela a sus compañeros: «El equipo ha hecho un gran trabajo y ha sabido sufrir. Yo no puedo correr así ni cinco minutos y ellos han corrido 120. Y me han ayudado mucho a elegir bien en cada jugada».

Como eligió bien el City, hasta los últimos metros. No encontraba Guardiola explicación a la eliminación: «Es fútbol. En otro deporte, por estadística se hubiera ganado. Tendríamos que haberlo cerrado antes». A diferencia de Pep, Ancelotti sí tenía un argumento: «Hemos sufrido, luchado, sacrificado y creo que hemos defendido muy muy bien».

Ancelotti entendió que la única manera de estar en semifinales era construir el pase en el compromiso defensivo. Hay veces que el fin sí justifica los medios: «Solo se podía ganar aquí de esta manera. A mí me gusta mucho cuando veo un equipo que se sacrifica y que lucha, además de tener calidad. En la tanda de penaltis estábamos convencidos que íbamos a pasar».

Ahora espera el Bayern, que incluso en su peor temporada en muchos años vuelve a estar en semifinales, como casi siempre. Catorce Champions contra seis. Eso exige respeto: «Estamos muy contentos de llegar a la semifinal, sobre todo tras eliminar al campeón de Europa, que es un gran equipo. ¿Jugar la final? De momento tenemos que ganar una semifinal».